Un fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación reconoce al exvicefiscal de la entidad, Luis Enrique Orozco, como su sustituto y el Congreso del Estado, controlado por la oposición, no ha aceptado aún su regreso. El ahora excandidato presidencial asegura que basta con la notificación que entregó al Legislativo local y publicó en el periódico oficial del Estado para retomar su cargo. La incertidumbre y la batalla política están lejos de amainar.
Ante ciudadanos y funcionarios, García ha narrado los minutos cruciales del pasado viernes que precipitaron su regreso. Ha reconocido que tenía interés de participar en la contienda por la presidencia de México pero las resoluciones judiciales no le han dado otra salida. “!Ni madres!” No le iba a dejar el gobierno al PRIAN”. En medio de la incertidumbre política y la batalla que ha declarado al PAN y al PRI en la entidad, asegura que los legisladores de dichos partidos buscan negociar su regreso a cambio de prebendas que no está dispuesto a conceder. En su sesión de este lunes el Legislativo local, comenzará a discutir el aval o el rechazo a la vuelta de García a la gobernatura.
Un día después de que asegurará que han buscado sobornarle panistas y priistas a cambio de que Javier Navarro, su secretario de Gobierno, asumiera el interinato, este domingo ha dado incluso los nombres de los personajes que presuntamente le han pedido como moneda de cambio algunos cargos y hasta recursos. García afirma que existe incluso una carta que contiene los 11 puntos del pliego petitorio de la oposición. Entre otros: recursos económicos, puestos de primer nivel en el gobierno estatal, exención de impuestos y la Fiscalía General de Justicia del Estado para el priista Adrián de la Garza. También incluían su desistimiento de las carpetas de investigación contra Francisco Cienfuegos, coordinador de enlace legislativo y delegado del PRI para las elecciones en Coahuila. Así como de Zeferino Salgado, presidente municipal de San Nicolás en 2018, todos por posibles actos de corrupción.
Para la mayoría legislativa, García está incurriendo en desacato al mandato de la Suprema Corte y en usurpación de funciones, según el presidente del Congreso Estatal, Mauro Guerra. El gobernador electo es consciente de la dilación al proceso que planean PAN y PRI para alargar su regreso por la vía legal a su cargo. “Quieren que les dé algo, ya me dijeron. Para que el Congreso vote que la licencia se acabó. No les voy a dar nada”, advierte a unas horas de que el Congreso sesione y de por recibido el oficio en el que declina a su licencia que comenzó a correr el primer minuto de este sábado.