“Yo les dije que no me he cambiado de casa porque espero que mi hijo vuelva algún día. Nunca, jamás imaginé que llegaría gente a preguntarme si Hugo ya regresó, en lugar de traérmelo. Yo les dije: ‘¿Saben por qué sigo en este domicilio? Porque estoy esperando que Hugo entre por esa puerta, y aquí voy a estar mientras tenga vida’…”.
Camelia Muñoz, la periodista que cité ayer en este espacio, relata en adondevanlosdesaparecidos.org.:
“Ella denunció la desaparición de su hijo ante las autoridades de Coahuila el 20 de julio de 2009 y ante la entonces Procuraduría General de la República en 2015. También registró el caso de Hugo en el Programa Especial de Personas Desaparecidas de la CNDH. Aun así, fueron a preguntarle si (su hijo) continuaba ausente”.
La mágica desaparición de más de 97 mil desaparecidos indigna a los colectivos de buscadoras que, como la ex titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, Karla Quintana, piensan que se pretende aligerar la carga que arrastran sobre todo los estados gobernados por Morena.
“Rechazamos las declaraciones del presidente. En sus manos no está el firmar que no hay tantos desaparecidos. El número de personas sin denuncias es casi igual al número de las personas con denuncia”, dice la representante de Amor por los Desaparecidos en Tamaulipas, Edith González Treviño, quien afirma:
“La falta de transparencia en las cifras viola los principios establecidos en la Ley General de Víctimas”.
El domingo reciente, en los límites de Tamaulipas y Nuevo León, su grupo localizó en un predio cráneos y huesos calcinados, un tambo y prendas de vestir.
“AMLO quiere ocultar a nuestros desaparecidos; dice que no hay tantos pero yo no sé cómo no podemos tener una cifra real de desaparecidos, yo no me atrevería, no nos atrevemos a dar una cifra”, dijo.
Para Karla Quintana, “la búsqueda es un asunto de Estado. Nadie está en contra de que haya un proceso de actualización de un registro. El problema es que no se está llevando a cabo por las autoridades especializadas (comisiones de búsqueda y fiscalías) ni está siendo coordinado por ellas. La intención que se tiene con este ejercicio no es actualizar un registro para tener la mejor información posible para poder encontrar a más personas. La intención, muy clara y lamentable, es reducir las cifras de personas desaparecidas principalmente en este gobierno…”.
María Elena Salazar le dijo a la periodista Muñoz que acudirá a la SB en Torreón para preguntar por qué desconocen que su hijo sigue desaparecido cuando su madre viaja, “como mínimo, dos veces al año a Ciudad de México para reunirse con agentes del Ministerio Público federal, y cada dos o tres meses sesiona con funcionarios del gobierno de Coahuila…”.