“Nosotros también estamos revisando con lupa lo que hacen estos organismos”, dijo ayer porque, en su opinión, lo mejor será “que desaparezcan todos estos organismos que crearon para proteger a particulares y afectar el interés público”.

En el paquete van la chatarrización del Instituto Nacional Electoral y la extinción del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales; la Comisión Reguladora de Energía, la Federal de Telecomunicaciones, y la neutralización del Poder Judicial de la Federación.

Ante este panorama, 180 organizaciones civiles han convocado a una marcha por la democracia para el 18 de febrero, y la de Ciudad de México culminará con mitin en la Plaza de la Constitución donde el ex consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, será el único orador.

El presidente López Obrador no la dejó pasar, pero antes se preguntó y se respondió:

“¿Saben cuántos conservadores o simpatizantes del pensamiento conservador existen en nuestro país, ciudadanos? Como 15 o 20 millones, y también están en su derecho porque no todos podemos estar pensando de la misma manera; es una corriente fuerte, unos abiertos y otros simuladores que aparentan ser de la sociedad civil, ser independientes. Miren, el que fue director (sic) del INE no se toca, Córdova: ahora va a encabezar una marcha. Nada más no vayan a pensar, ¿eh?, que tiene propósitos políticos, partidistas, no, no, no. Son independientes, sí, son de la sociedad civil, están muy preocupados por la democracia y por el pueblo”, ironizó, y calumnió:

“Este señor Córdova recibía órdenes del presidente. Cuando había que recabar firmas para ser candidatos, si le daban órdenes, aunque no juntaran las firmas, les daban los registros a los candidatos”.

No sobra recordar que durante la gestión de Córdova el INE le negó su registro al partido México Libre que impulsaron el ex presidente Felipe Calderón y Margarita Zavala.

Lo de ideologizar todo de cuanto habla no es nuevo en AMLO. Ya desde 2000, cuando iniciaba su jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal, solía decir que la elección presidencial de 2006 no sería entre partidos, sino entre “liberales y conservadores”.

Pero, ¿Córdova conservador? Defender la democracia, la institucionalidad y la Constitución es lo que honra la carrera pública y académica de Lorenzo.

Desaparecer instituciones autónomas que hablan por la sociedad frente a los Tres Poderes, atacar e infiltrar al Judicial y promover leyes contrarias a la Constitución, eso sí que nada tiene de progre o “revolucionario…”.