El Senado de EE UU ha presentado este domingo un esperado proyecto de ley bipartidista para reforzar la seguridad fronteriza y ayudar a Ucrania e Israel con un presupuesto total de 118.000 millones de dólares. Se prevé que el texto sea sometido a votación a lo largo de la semana, pero las expectativas en torno a su aprobación son inciertas dada la oposición de los republicanos de línea dura y también de la facción más progresista de los demócratas, que ostentan la mayoría en el Senado por un solo voto de diferencia.
Un día después de que el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, anunciara que la aprobación de una nueva ayuda a Israel quedaba desvinculada de la prevista para Ucrania por las diferencias entre ambos partidos, el esperado acuerdo bipartidista de la Cámara alta da luz verde al paquete completo, que subordinaba las ayudas a los dos países en guerra a un acuerdo fronterizo por la insistencia republicana.
La redacción del borrador, de 370 páginas, se ha prolongado durante tres meses en negociaciones dirigidas por los senadores James Lankford (republicano por Oklahoma), Chris Murphy (demócrata por Connecticut) y la independiente y anteriormente demócrata Kyrsten Sinema (Arizona).
A la cabeza del acuerdo están las restricciones al asilo, un importante punto de fricción en las últimas semanas. La provisión completa del proyecto de ley, sumando fondos para la frontera y la ayuda a Ucrania e Israel, además de otras importantes prioridades de política exterior, asciende a 118.000 millones de dólares, de los que unos 20.000 millones se destinan al refuerzo de la seguridad fronteriza.
El resto de partidas se reparten entre los 60.060 millones de dólares para apoyar a Ucrania en su guerra contra Rusia, 14.100 millones para contribuir a la seguridad de Israel, 2.440 millones de dólares para el Mando Central de Estados Unidos y el actual conflicto en el mar Rojo, con ataques casi diarios de las milicias huthíes; más 4.830 millones de dólares para apoyar a los aliados de Estados Unidos en el Indo-Pacífico en un contexto de creciente hostilidad entre Taiwán y China, según una fuente del Senado citada por Reuters.
Otros 10.000 millones de dólares se destinarían a ayuda humanitaria para la población civil de Gaza, Cisjordania y Ucrania, según la misma fuente.
“Las prioridades de este proyecto de ley son demasiado importantes como para ignorarlas y demasiado vitales como para permitir que la política se interponga”, dijo Chuck Schumer, el líder de la mayoría demócrata en el Senado, en un comunicado. “Estados Unidos y nuestros aliados se enfrentan a desafíos múltiples, complejos y, en algunos lugares, coordinados por parte de adversarios que buscan perturbar la democracia y expandir la influencia autoritaria en todo el mundo”.
El líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, ha apoyado las negociaciones, al considerar que su partido no conseguiría un acuerdo mejor bajo una Casa Blanca en manos republicanas. Otros correligionarios suyos sostienen sin embargo que el presidente Joe Biden podría promulgar muchos de los cambios en política migratoria mediante una acción ejecutiva.
El presidente Biden había pedido al Congreso en octubre que aprobara una ley que proporcionara fondos adicionales para la ayuda a Ucrania, Israel y Taiwán, en un contexto incierto por el conflicto empantanado en Ucrania; una guerra que se prolonga entre Israel y Hamás y las posteriores elecciones presidenciales en Taiwán, que dieron la victoria a un candidato que China considera un peligro.
Pero la petición de Biden se estancó por la insistencia de los republicanos de la Cámara de Representantes, donde tienen la mayoría, en vincularla a un cambio en la política migratoria.
La inmigración, que va camino de convertirse en el tema central de la campaña para las elecciones presidenciales de noviembre, es la segunda preocupación de los estadounidenses, según una encuesta de Reuters/Ipsos publicada este miércoles, además de una punta de lanza para los republicanos a la hora de arremeter contra sus rivales demócratas. La Patrulla Fronteriza estadounidense detuvo a unos dos millones de inmigrantes en la frontera en el año fiscal 2023. Sólo en diciembre se produjeron más de 300.000 cruces, superando los 240.000 cruces registrados en cada uno de los últimos cuatro meses.