Industriales mexicanos, sobre todo del sector del vestido, acusaron un esquema ilegal de importación de pacas de prendas asiáticas a través de sitios de comercio online como Shein y Temu que se ofrecen en el mercado nacional a precios con los que no se puede competir.
Los organismos empresariales acusan que hay jugadores en el comercio informal que se aprovechan del esquema conocido como ‘minimis’, diseñado para beneficiar al consumidor final que adquiere bienes importados sin pagar aranceles, lo que se traduce en contrabando y competencia desleal para los negocios formales.
Además, la pandemia de Covid-19 actuó como un catalizador de las compras de productos extranjeros a través de plataformas y sitios de comercio electrónico, lo que llevó a que a diario ingresen al país más de 820 mil pedidos por empresas de paquetería y en la práctica se genera un contrabando hormiga, dijo la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
Al tratarse de productos para consumo personal, esas compras a comercios extranjeros, sobre todo ubicados en Asia, ingresan al país sin pagar impuestos siempre y cuando su precio sea menor a 50 dólares. No obstante, hay personas que importan por esa vía para luego revender ilegalmente las prendas a través de redes sociales o en mercados y tianguis.
El socio patrimonial de la firma de abogados Ibarra & Gaalanis Jorge Eduardo García Alanís explicó que la ley otorga exenciones para importar productos, pero en este caso hay elusión y evasión que cae en el delito de contrabando de la Ley Aduanera.
“Si importas un equipo que tiene un valor o factura que supera el monto permitido, estás obligado a declarar esa parte y pagar los impuestos respectivos por la diferencia”, afirmó el especialista.
El concepto ‘minimis’, derivado de la expresión en latín de minimis, se refiere a algo que no tiene la suficiente importancia como para que la ley le preste atención. La Organización Mundial del Comercio explica que se trata de cantidades mínimas de ayuda interna que están permitidas aun cuando tengan efectos de distorsión comercial.
En el caso de México, el socio de Consultores Internacionales Ansley Roberto Zapata explicó que la legislación aduanera permite a las personas importar productos con un valor de hasta 50 dólares libres de arancel e IVA a través de empresas de mensajería.
Sin embargo, Alberto Campos, quien es socio del despacho legal Sánchez Devanny, destacó que “se ha dado un crecimiento de paquetes porque [a través del comercio electrónico] se pueden pedir ropa, juguetes y electrónicos”.
“El producto tiene un valor muy bajo y las reglas establecen que para este tipo de artículos no hay que pagar impuestos o se paga una tasa fija”, agregó.
Hace un par de semanas, Manuel Cardona, director de relaciones con Gobierno de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), dijo en una conferencia de prensa que el esquema ‘minimis’ se diseñó para el consumidor, pero hay jugadores que han encontrado la forma de no declarar de manera correcta las importaciones.
Ante ello, la asociación busca llevar el tema ante la Secretaría de Economía (SE) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con el fin de denunciar las prácticas ilegales detectadas.
A su vez, la Concamin dijo que buscará dialogar sobre el mismo problema con el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM).
Páginas asiáticas de comercio electrónico —como Shein y Temu— son conocidas por ofrecer sobre todo ropa y calzado para toda la familia, pero también cuentan con categorías de productos como hogar y cocina, juguetes, joyería y accesorios, automotriz, patio y jardín, dispositivos electrónicos, herramientas, electrodomésticos, así como instrumentos musicales.
Como ejemplo, en el caso de la categoría de moda, para los usuarios al menudeo en la sección de novedades de Shein se pueden encontrar vestidos con precios de más de mil pesos por pieza, pero en su área de rebajas se ofrecen prendas como tops o camisetas que van desde los 50 pesos.
El envío es gratis en pedidos de más de 99 pesos y la entrega demora alrededor de tres semanas, aunque hay una opción de envío exprés —nueve días— con el pago de una cuota adicional de 460 pesos. Dependiendo del monto del pedido se pueden aplicar descuentos de hasta 40% si la compra es mayor a 2 mil 999 pesos.
Con precios y condiciones de entrega similares, Temu ofrece envío gratis en todos los pedidos.
Sin embargo, el problema denunciado por los organismos industriales mexicanos tiene que ver con pacas de prendas que se comercializan en redes sociales, donde se ofrecen los productos al mayoreo con precios más bajos.
En Facebook, la búsqueda “mayoreo Shein” resulta en grupos de intermediarios donde se ofrecen paquetes con entre 100 y 200 prendas, con precios de entre 50 y 60 pesos por pieza.
Pero en TikTok se encuentran videos de usuarios con tutoriales para evitar esos intermediarios y comprar las prendas al mayoreo de forma directa a “distribuidores autorizados” que, de acuerdo con lo referido, se encuentran sobre todo en Panamá.
En este caso, se asegura que se pueden adquirir las pacas a precios de uno o dos dólares, y también se brindan consejos para el almacenaje, así como el envío de los paquetes al país de la persona interesada en hacer negocios.
En respuesta a una solicitud de comentarios de EL UNIVERSAL, la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive) denunció que hay influencers que comercializan ropa de importación ilegal, ofrecida en pacas, y la promueven en plataformas digitales como YouTube, TikTok o Facebook.
Esos productos se venden también en los tianguis y puestos callejeros, y bajo esas prácticas “no hay empresas formales que puedan competir”, mencionó el organismo empresarial.
Otro problema está en que las importaciones por mensajería no cumplen con la normatividad establecida, mientras que los fabricantes nacionales sí deben apegarse a las Normas Oficiales Mexicanas, además de que se declaran precios por debajo del costo real con el fin de evadir impuestos, en tanto que las tiendas establecidas sí deben pagar impuestos.
“Si se considera el número de operaciones en las aduanas de los tres principales regímenes de importación —definitivas, temporales y virtuales—, las operaciones bajo el régimen de mensajería representaron alrededor de 14.5% del total en 2023”, dijo la Canaive.
Lo anterior significa que 14 de cada 100 operaciones corresponden a productos de importación por mensajería. En 2019 esas importaciones representaban apenas 5%, pero a partir de la pandemia casi se triplicó su participación, pasando a 9.7% en 2020, 10% en 2021 y 11.2% en 2022.
“Con esta tendencia en el crecimiento, es de suma importancia tomar acciones para regular las operaciones que están abusando de un mecanismo que no fue creado con estos fines”, alertó la cámara.
Otro problema que ha sido detectado por el sector empresarial es que las importaciones por mensajería no necesariamente cumplen con la normatividad establecida, mientras que los fabricantes nacionales deben apegarse a las Normas Oficiales Mexicanas.
“Son productos de baja calidad que no cumplen con las NOM [Normas Oficiales Mexicanas] ni requisitos, son productos que son para uso propio, dijo la Canaive.
Sin embargo, hay personas que importan dos paquetes por día y eso básicamente significa que “se está haciendo una importación hormiga” para luego revender los productos sin pagar impuestos, lo cual también representa una competencia desleal.
“El erario reporta un importante quebranto al no recibir estos recursos, resultado de un abuso al mecanismo y una clara evasión fiscal”, subrayó la cámara.