A 16 días de que las banderas rojinegras comenzaran a ondear en la fachada de la planta de Audi en Puebla, la armadora alemana ha hecho un último ofrecimiento a sus trabajadores para conjurar la huelga estallada a finales del mes pasado. Además del ofrecimiento del 7% del salario —un alza por debajo del 15% que exige el sindicato—la empresa ha asegurado que si los más de 4.159 sindicalizados avalan esta propuesta y terminan la suspensión de labores se podrá garantizar el trabajo para los 1.300 técnicos y los empleados temporales recibirán un contrato por 12 meses adicionales. La empresa ha lanzado esta última oferta in extremis para conjurar una huelga, que de acuerdo con el sector automotriz, ya rebasa los 10.000 millones de pesos en pérdidas.
Los más de 4.000 trabajadores adscritos al Sindicato Independiente de Trabajadores de Audi México (Sitaudi) acudirán este viernes al Complejo Cultural Universitario de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) para votar a favor o en contra de la oferta de la armadora alemana de 5% al salario directo y un 2% más en prestaciones, es decir una propuesta integral de un 7% más en su sueldo del 2024. Pese al alza, este incremento supone menos de la mitad de 15% que busca el sindicato. Los empleados esgrimen que en otras armadoras los trabajadores han conseguido un aumento de doble dígito. El horario de votación será desde las 8.30 a 22.00 horas de este viernes.
En vísperas de esta crucial votación, la automotriz alemana envío un comunicado a sus trabajadores exponiendo los supuestos riesgos de continuar con esta huelga para la viabilidad de la planta en Puebla. La empresa refiere que de seguir con las líneas de producción detenidas la producción y ventas de Audi México se verán impactadas negativamente, poniendo en riesgo la atracción de futuros proyectos. Por el contario, afirma que si los trabajadores aceptan su propuesta, se les pagará a partir de la próxima semana la totalidad de salarios devengados, contemplando el pago retractivo del alza salarial desde el 1 de enero a la fecha. Además, Audi se compromete a cubrir el 50% de los salarios caídos, correspondientes a los días de huelga y a depositar los vales de despensa del mes de enero.
El líder de la Coparmex en Puebla, Rubén Furlong Martínez, advierte de que la extensión de la huelga, que ya acumula 384 horas, impactará en la imagen de la planta con sede en San José Chiapa. De acuerdo con el organismo patronal, cada día de huelga equivale a 700 vehículos que se dejan de producir desde esta factoría, un descalabro operativo cifrado en 10.000 millones de pesos en pérdidas. “Una huelga no le conviene a nadie, ni al Estado, ni a la empresa y mucho menos a los trabajadores”, zanja.
Furlong Martínez explica que este conflicto laboral llevado a sus últimas consecuencias es la primera huelga en Puebla desde 2009, cuando estalló un conflicto similar en la armadora Volkswagen. “No hay mucho más margen de maniobra para la empresa, es el punto máximo al que pudieron llegar y yo espero que los trabajadores puedan reflexionar sobre el cambio que ha habido el mercado premium de automóviles, la empresa tiene que competir por estos proyectos con otras fábricas del mismo grupo. No necesariamente lo que sucede en otra empresa puede ser un punto de comparación para lo que sucede en Audi”, dice.
El representante empresarial confía en que este viernes las dos partes: directivos y sindicalizados lleguen a un acuerdo benéfico para ambos. De lo contario, mencionó el boquete de pérdidas económicas para Puebla, e incluso para otros Estados proveedores de autopartes como Querétaro continuará creciendo.
La industria automotriz en México cerró el 2023 con crecimientos en producción y exportaciones. México envió al exterior 3,3 millones de unidades, un crecimiento del 15% respecto a 2022. Además, las automotrices en el país ensamblaron un total de 3,7 millones de vehículos el año pasado, 14% más en comparación al año previo, según los datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).