Mario Figueroa Mundo, el alcalde de Taxco, en Guerrero, que negaba que hubiera violencia en su municipio, se ha visto en la tarde de este jueves en medio de un tiroteo entre sus escoltas y dos hombres a bordo de una moto. De acuerdo con la versión oficial difundida por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal, los dos hombres asaltaron una pollería, donde hirieron a un empleado, y huyeron. Durante la fuga, se encontraron por casualidad con el vehículo en el que viajaban el dirigente y su guardia personal, que intentaron detener a los presuntos ladrones. Hubo un intercambio de disparos, que provocó que la camioneta de Figueroa Mundo “chocara con otro vehículo tipo Sprinter blanca” y que la moto de los agresores derrapara. Uno de ellos murió por el impacto, el otro resultó herido, al igual que uno de los custodios del funcionario. El comunicado de la SSP asegura que Figueroa Mundo “resultó ileso”. Otros reportes en los medios locales señalan que sufrió lesiones, pero se encuentra bien.
“Por este hecho, el alcalde resultó ileso y recibió el apoyo y atención por parte de personal de seguridad de la Secretaría de la Defensa Nacional [Sedena], la SSP Guerrero y la Guardia Nacional”, afirma el comunicado, la única información que ha trascendido al cierre de esta nota. Figueroa Mundo ya se encuentra a resguardo de las autoridades, fuera de peligro. La Fiscalía estatal, consultada por EL PAÍS, solo ha informado de que los policías de investigación se encuentran en el lugar de los hechos reuniendo evidencias y entrevistando a posibles testigos. La Sedena, la SSP y la Guardia Nacional han desplegado un operativo en las entradas y salidas de Taxco “para brindar seguridad en la zona”.
La seguridad es precisamente el tema omnipresente estos días en el pueblo mágico. Uno de los grandes destinos turísticos del interior de Guerrero vive en los últimos meses una deriva violenta. Dos grupos criminales que se han hecho fuertes en la región, La Familia Michoacana y Los Tlacos, batallan por el control de las calles y el transporte público. Ambos clanes mafiosos mantienen atenazada a la población local, mediante decenas de asesinatos, secuestros y amenazas a cambio de pagar derecho de piso.
A finales de enero, el municipio vivió sus días más difíciles: los transportistas suspendieron el servicio ante la falta de seguridad, los colegios suspendieron las clases y muchos negocios decidieron no abrir. Dos policías de la Fiscalía de Guerrero, Higinio Villanueva y Ángel Meza, desaparecieron el 23 de ese mes. Sus cadáveres fueron encontrados al día siguiente en la comunidad de Tlamacazapa, a las afueras. Ambos investigaban el estallido de violencia en el pueblo.
En esas fechas, Figueroa Mundo, de Morena, se ausentó del municipio, a pesar de la crisis de inseguridad, para asistir a Fitur, una feria internacional de turismo que se celebra en Madrid. Mientras los dos policías eran asesinados, el crimen paralizaba Taxco y la población temía por el devenir de la situación, el alcalde se dejó ver en la capital española, tras notificar su ausencia en el Congreso local.
Un día después del homicidio de los agentes, el funcionario publicó un video en su perfil de Facebook en el que se refirió al conflicto como “bachecitos”: “Fui a la Fitur, íbamos por seis días, pero desgraciadamente está pasando esto y yo se lo digo con mucho respeto: los grandes productos son los que se deben de estar promoviendo, y aquí el gran producto es Taxco (....) Sé que estos bachecitos van a seguir pasando. Nosotros íbamos para toda la semana, pero desgraciadamente está pasando esto y aquí estoy dando la cara, ya nos vamos a las mesas de seguridad, vamos a seguir trabajando”.
El suceso le granjeó fuertes críticas de los habitantes de Taxco, la oposición y la opinión pública, que consideraron que había dejado al pueblo a su suerte mientras la violencia se extendía en las calles. A pesar de la realidad, Figueroa Mundo se negó a aceptar la situación. El 9 de febrero, aseguró que “no fue violencia lo que vivió el municipio porque realmente lo que es tener una suspensión por parte de los transportistas, pero lo que estamos viviendo es una buena afluencia de turismo nacional e internacional”.
No solo es Taxco. Todo Guerrero lidia con una crisis de inseguridad que ha provocado que incluso la Iglesia haya tomado cartas en el asunto. A mediados de enero, cuatro obispos se reunieron en Ciudad Altamirano con líderes de La Familia Michoacana y Los Tlacos para negociar una tregua que no se alcanzó. La panorámica de la región no es halagüeña: niños soldados obligados a tomar las armas contra el crimen organizado, masacres, secuestros, conflictos en la sierra, la guerra abierta por el transporte público a lo largo de todo el territorio o la reconstrucción de Acapulco, la joya de la corona del Estado, arrasada por un huracán en octubre y asolada ahora, también, por las mafias. Este miércoles, la fiscal general del Estado, Sandra Luz Valdovinos Salmerón, una de las principales responsables en la lucha contra la inseguridad, anunció que dejaba su cargo durante seis meses “por motivos personales y familiares”.