Tomo de Jash Dholani (@oldbooksguy), a quien recomiendo seguir, nueve “verdades paradójicas” como dice él, nueve “paradojas desafiantes”, sugiero yo, de autores brillantes:
1. C. S. Lewis: La originalidad se alcanza mejor vía la copia.
2. Nietzsche: La compasión es un garlito diseñado para dirigir recursos de quienes más lo merecen a quienes lo merecen menos.
3. Chesterton: Tienes que odiar el mundo suficiente para cambiarlo, pero tienes que quererlo suficiente para creer que vale la pena cambiarlo.
4. Napoleón: La lógica puede hacerte perder guerras porque a veces el momento exige maniobras imaginativas que funcionan porque son irracionales.
5. Camille Paglia: El liberalismo define al gobierno como un padre tiránico pero exige que se porte como una madre amorosa. La sociedad debe ser tan tiránica que pueda protegerte de tuits infamantes, pero también tan permisiva que puedas cambiar de género (y de regreso).
6. Chateaubriand: La belleza es inútil si buscas eficacia, pero impresionantemente útil si buscas cosas que amar. La belleza es un lujo dispendioso, pero es lo único que la gente al final cuidará, hasta para peregrinar en su busca.
7. John Morley: La gran escritura vive en la frontera de lo misterioso y de lo obvio. Demasiado misterio es inaccesible; demasiada obviedad, aburrida.
8. La Rochefoucauld: La ausencia diluye los pequeños amores pero aumenta los grandes, como el viento apaga las velas pero aviva los incendios. El tiempo abolirá lo débil y fortalecerá lo real
9. John Fowles: La inteligencia es un don aterrador. La habilidad de predecir las consecuencias de cada acción significa que perderás mucho tiempo perdido en un ‘laberinto de hipótesis’. Regla número 1: no pierdas la voluntad.
Añado, de George Santayana: “Atreverse en la guerra es un mérito del soldado, una cualidad peligrosa en el capitán y un crimen en el estadista”.
Otra: “Caos es el nombre de un orden extraño que produce confusión en nuestras mentes”.
Este domingo, 18 de febrero, la Marcha por Nuestra Democracia, convocada por 210 organizaciones de la sociedad civil, en 107 ciudades de México.
Ahí nos vemos.