La alta concentración de ozono registrada en Ciudad de México ha provocado que la Secretaría de Medioambiente haya extendido a este sábado el plan de contingencia ambiental iniciado el jueves “con el fin de proteger la salud de la población y prevenir la exposición a niveles altos de ozono”, ha asegurado la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) en un comunicado. El organismo ha pedido a los habitantes de la capital “mantenerse informados” y “evitar hacer ejercicio en exteriores entre las 13:00 y 19:00″ ante la calidad del aire, “en rango de muy mala”.
La CAMe previene que, para este sábado 24 de febrero, los pronósticos meteorológicos indican que continuará el sistema de alta presión en el centro del país, asociado con una masa de aire con bajo contenido de humedad, intensa radiación solar, estabilidad atmosférica moderada a fuerte y viento débil, por lo que se estima que la calidad del aire será de muy mala.
El Sistema de Monitoreo de la Calidad del Aire de la ciudad ha asegurado que “persistirá la circulación anticiclónica afectando al centro del país”. La masa de aire que conlleva el fenómeno meteorológico tiene un “bajo contenido de humedad, dando lugar a cielo despejado durante el día”. También el viento este viernes ha presentado una intensidad baja, que ha oscilado entre los cuatro y los ocho kilómetros por hora y ascenderá a entre siete y 13 kilómetros por hora, durante la última parte del día. “Estas condiciones meteorológicas propiciarán de moderado a significativo estancamiento de los contaminantes precursores del ozono y formación del mismo, ocasionando calidad del aire de mala a muy mala”, ha sostenido el organismo.
Las previsiones meteorológicas de Ciudad de México han encendido las alertas de los expertos. El 8 de febrero se registraron temperaturas de 30°, rozando el récord, un calor propio del verano, no de la mitad del invierno. La inminente llegada de la primavera (el 20 de marzo) preocupa a los expertos por las subidas de temperatura y la posibilidad de una estación seca, teniendo en cuenta que el nivel de agua en las presas que abastecen a la capital es muy bajo.
La Secretaría de Medioambiente activó la contingencia ambiental el jueves y solicitó a los habitantes de la capital no fumar y evitar las actividades al aire libre. También se han aplicado restricciones en la circulación de coches. La contaminación por la alta concentración de vehículos y su emisión de gases, las elevadas temperaturas para el mes de febrero y la ausencia de lluvias han generado una concentración máxima de ozono en el aire de 187 ppb [partes por billón], en la estación de monitoreo de la Facultad de Estudios Superiores de Aragón, ubicada en el municipio de Nezahualcóyotl, en el Estado de México. El pico límite para activar el plan de contingencia es a partir de 155 ppb.
La fase 1 de la contingencia ambiental, según recomienda Medioambiente, incluye tratar de trabajar desde casa, duchas de solo cinco minutos para reducir el consumo de gas, eludir el uso de aerosoles como los desodorantes y comprar en aplicaciones en línea para reducir los viajes. En el sector servicios, las prohibiciones más relevantes serán las de las gasolineras, que tendrán que reducir un 20% el número de operaciones. Los bares, restaurantes y otros negocios que usen carbón o leña tendrán que suspender sus actividades. Las empresas de pintura están obligadas a parar sus labores. Todas estas limitaciones se aplican en toda la Ciudad de México y en 69 municipios conurbados del Valle de México.
La última contingencia ambiental en el Valle de México se activó el pasado 1 de enero, pero solo en la zona suroeste de la ciudad. La mala calidad del aire en la Ciudad de México y sus alrededores es un problema persistente desde hace años. La plataforma de medición IQAir situó la urbe entre las 50 ciudades con la peor calidad del aire del planeta.