Un grupo de normalistas irrumpió en Palacio Nacional y durante una protesta por el caso de los 43 de Ayotzinapa derribó una puerta del recinto, donde el presidente Andrés Manuel López Obrador ofrecía su conferencia matutina, lo que causó reacciones de diversos personajes políticos, llevando el tema al centro de la rebatiña política, a menos de tres meses de la elección federal.
Con una camioneta de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) como ariete, poco antes de las 9:00 abrieron el portón ubicado en la calle Moneda. Mientras decenas de manifestantes —en su mayoría encapuchados— rompían ventanas y hacían pintas en el edificio.
Al respecto, el Presidente aseguró que los inconformes iban a ser atendidos por el subsecretario de Gobernación, Arturo Medina.
“Yo estoy analizando y conduciendo todo, porque lo que me importa es encontrar a los jóvenes.
“La actitud, no de los padres, sino de los asesores y organizaciones que supuestamente defienden derechos humanos, es en el mejor de los casos política, muy de confrontación, en contra nuestra”.
Se comprometió a recibir a los padres de los 43 “en 15 o 20 días”, al acusar que estos han sido manipulados por defensores de derechos humanos que, dijo, encabeza el senador Emilio Álvarez Icaza.
En X, el Centro Prodh aseguró que los padres no son manipulados y afirmó que los familiares “tienen agencia sobre su proceso”.
El abogado de los familiares de los 43, Vidulfo Rosales, dijo en MILENIO Televisión que las declaraciones del Presidente se deben a que “trata de buscar culpables de su fracaso en la investigación, ya no tiene respuestas, no ha logrado el esclarecimiento de los hechos”.
Sobre el diálogo con Medina, apuntó que no ha rendido frutos, por ello insisten en reestablecer el contacto con el Presidente.
Por la tarde, los familiares y normalistas desmontaron el campamento instalado desde el 26 de febrero en la Plaza de la Constitución y regresaron a Guerrero.
Al respecto, la Fiscalía General de la República inició una carpeta de investigación por los hechos de violencia por parte de normalistas y familiares de los 43 en los últimos días en Ciudad de México.
La carpeta se inició el pasado lunes, tras impactar una camioneta contra el Centro Nacional de Arraigos, en la alcaldía Cuauhtémoc, y se sumó el portazo en Palacio.
En tanto, la Secretaría de Gobernación afirmó que el presidente de la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia en el caso Ayotzinapa, Arturo Medina, ya contactó a padres de los normalistas y planteó como eje de acción el reforzamiento de las búsquedas en campo y continuar con los esfuerzos para romper el pacto del silencio.
Por su parte, el pleno de la Cámara de Diputados guardó un minuto de silencio en memoria de los 43 luego del portazo.