I. Cuenta regresiva. La Procuraduría General de la República tiene nueve órdenes de aprehensión en contra de colaboradores cercanos a Guillermo Padrés Elías, exgobernador de Sonora, y se espera que en las próximas horas jueces federales consignen a 20 exfuncionarios públicos que incurrieron en presuntos actos de corrupción, además, se emitió una orden de arresto por desacato a un mandato judicial para Francisco Padrés, tío del exgobernador. Mucho se habló de los negocios del tío y su enriquecimiento inexplicable. No cabe duda, el exmandatario panista sigue siendo un fuerte candidato para habitar un reclusorio federal. Sólo falta que se decidan.
II. Descontrol. Otra historia de nepotismo, pero ahora en Ixmiquilpan, Hidalgo. Simón Vargas Aguilar, secretario de Gobierno, advirtió que el presidente municipal, Pascual Charrez Pedraza, está bajo investigación por contratar a sus familiares para su administración. Charrez Pedraza nombró secretaria de Obras Públicas a su esposa, y sus hermanos están a cargo de la dirección de Gobierno y en la Secretaría de Desarrollo Social. Vargas Aguilar sentenció que “los hechos ilegales al margen de la ley deben tener consecuencias”. Ya no es raro, pues hay muchos funcionarios que convierten sus oficinas en agencias de colocación de empleo familiar. Los políticos no aprenden y lo malo es que nada les pasa. ¿O sí?
III. Malas noticias. El panorama de Guerrero no se aclara con la detención de Clara Elena Laborín Archuleta, La Señora, exesposa de Héctor Beltrán Leyva y quien traía asolado, sobre todo, a Acapulco. Fue detenida la madrugada del lunes en Hermosillo, Sonora, durante un operativo realizado por agentes de la División de Investigación de la Policía Federal y la PGR-SEIDO, con información del Centro de Investigación y Seguridad Nacional. Las autoridades federales prevén un reacomodo de las bandas delictivas, lo que derivará en un incremento de los índices de violencia. Éstas son malas noticias para los habitantes del estado. Será un rojo atardecer en Acapulco.
IV. Podredumbre en Naucalpan. ¡Qué pena! Un automovilista exhibió en redes sociales un video de la agresión por parte de un policía de Naucalpan, identificado como Lennin Martínez, luego de llamarlo “corrupto”, supuestamente porque Martínez le pidió mordida a cambio de no llevar su auto al corralón por la falta de un engomado, acusación que el conductor asegura es falsa. Eruviel Ávila, gobernador del Estado de México, tuvo que dar la cara. Y a través de la misma red social, la Inspección General de las Instituciones de Seguridad Pública del Estado de México respondió a la denuncia. El oficial fue separado de su cargo. ¿Y Édgar Olvera Higuera, el alcalde de Naucalpan, se lleva las mochadas?
V. Adelantadito. El gobernador electo de Aguascalientes, el panista Martín Orozco Sandoval, acudió a San Lázaro para cabildear mayores recursos en favor de su estado, siendo que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en breve fallará la impugnación de la elección interpuesta por el Partido Revolucionario Institucional. A ver si al final de este proceso no aplica el popular dicho: “Nadie sabe para quién trabaja”. Lo bueno será que en cualquier caso, los mayores recursos beneficiarán a la población hidrocálida. Lo malo es que el coordinador de los diputados de Acción Nacional, Marko Cortés, afirmó que la prioridad de su fracción serán los 11 gobiernos estatales que encabezará su partido ¿Y las otras entidades no cuentan?