LOS PENDIENTES DE LA CUATRO T EN EL ESTADO DE MORELOS
Los tres mil quinientos millones de pesos que adeuda Cuauhtémoc Blanco y el reclamo de la Auditoría Superior de la Federación.
Otro pendiente es que nunca se explicó por qué le aplicaron la cláusula de exclusión a la senadora Lucía Meza Guzmán.
Tampoco se ha dicho que la elección de Morelos está impugnada, que está sub judice, que no le han entregado el acta de mayoría a la licenciada Margarita González Saravia y que todavía se espera el veredicto de los magistrados de la Sala Regional.
Para empezar diremos y preguntamos directamente a la virtual gobernador electa, que todavía no tiene su acta de mayoría en la mano, ¿qué cosa va a hacer con la acusación de los tres mil quinientos millones de pesos que la Auditoría Superior de la Federación le reclama al gobernador actual Cuauhtémoc Blanco Bravo, que aparentemente los gastó en obras y ejercicio sociales y apoyos que no tienen ningún sustento?
No hay ninguna obra, ninguna justificación, ninguna factura, ningún recibo que ampare esos mucho más de tres mil millones de pesos.
La Auditoría Fiscal se los está exigiendo. No lo han chingado porque el señor presidente Andrés Manuel López Obrador, de todos mis respetos, se ve que lo protege a capa y espada. Pero ya se va.
Y aunque el señor gobernador asuma de diputado en el Congreso de la Unión, ese faltante existe y se lo van reclamar penalmente.
Y Margarita, ¿qué va a hacer, porque ese dinero le va a faltar en su cuenta, en su cuenta del gobierno del estado? ¿Qué va a hacer Margarita, ¿Ella va a devolver la copa? ¿Ella va pedir un crédito para pagar el faltante de Cuauhtémoc? ¿Ella le va a ayudar o lo va a denunciar?
Tendría que estar obligada, al hacer la entrega-recepción, a denunciar este hecho, como ya lo denunció en la campaña la senadora Lucía Meza Guzmán. Ese es uno de los pendientes que López Obrador, en su despedida en Morelos. Vino a hacer una fiesta triunfal una romería, como dijo alguna ilustre doctora. El pueblo de Morelos lo idolatra.
Pero no vino a festejar resultados, porque resultados no tenemos, ni del gobierno estatal ni del federal. Pero del estatal tenemos aquí cuatro mil muertos que pesan sobre Cuauhtémoc Blanco y sobre el almirante Ortiz Guarneros.
De eso tampoco habló, y mucho menos habló de por qué descalificaron, por qué le aplicaron una cláusula de exclusión, para cortarla, a la senadora de la República Lucía Meza Guzmán.
Ahí tienen la foto del recuerdo. Están en el Restaurante Los Vikingos, donde Harry Nielsen les tomó la placa. En donde está a la cabeza Rabindranath Salazar Solorio y están, a su izquierda y a su derecha, Lucía Meza y Margarita González y adelante está Juan Ángel Flores Bustamante y a la derecha, Rafael Reyes. Todos participaron por la gubernatura. Sólo llegó una, como candidata.
Pero a Lucía Meza Guzmán le aplicaron gacha una cláusula de exclusión que porque la denunció alguien. Pues ese alguien debió haber sido Ulises Bravo por instrucciones de, para quitarla del camino y dejar sola a Margarita, que tiene una gran amistad con Beatriz Gutiérrez Müller y con el señor presidente.
O sea que fue por amiguismo. Está bien, se vale. Lo que no se vale es que hayan dicho allá en la Comisión de Honor y Justicia que la corrieron porque era muy amiga del fiscal panzón, del Fiscal Uriel Carmona Gándara, que trae un pleito personal con nuestra esbeltísima presidenta de la República electa, con Claudia Sheinbaum Pardo.
Y ahí se llevó entre las enaguas a la candidata senadora de la República que, en honor a la verdad, y sin quitarle nada a nadie, tenía más nivel político una senadora de la República que Margarita González Saravia que no era nada, que era una ciudadana empresaria.
Pero, tenía el peso de la amistad del Presidente. La forma poco tersa, burda sucia, cochina, atascada –cochinos marranos, diría López Obrador- en la que la sacaron de la jugada realmente no tuvo madre.
Fue una mancha que no han podido explicar y esa mancha es responsabilidad de AMLO. Se la ordenó a Claudia Sheinbaum: límpiale el camino a Margarita. Y Claudia le dijo a Mario Delgado: límpiale el camino a Margarita. Y Mario hizo la peor pendejada que pudo, lo hizo de la peor manera posible. Es un traidor. Ya lo sabe el señor Marcelo Ebrard Casaubón con quien jugó primero y luego lo traicionó para irse con Claudia. Ese va a ser el secretario de Educación Pública.
Pero de eso no estamos hablando, estamos hablando de los pendientes que dejó López Obrador aquí , además de los 180 y tantos mil muertos que deja en todo el país. Aquí, en Morelos, van cuatro mil homicidios dolosos. Una cadena de feminicidios, panteones completos.
La policía, el Ejército, la Guardia Nacional y la Marina han servido para chingada madre, porque si hubieran servido, hubieran evitado algunos miles de asesinatos. No lo han hecho y tan no lo han hecho que aquí estamos. Anoche mismo, ahí por el zócalo se quebraron a dos, anoche, a las once y media. ¿En qué país vivimos, en qué país estamos?
Y yo admiro a López Obrador y yo funde con otros, como Raúl Iragorri, el partido Morena.
Ahora, me asombro de esta entelequia y también pienso que yéndose López Obrador se acabó Morena. El que le daba vida y sustento es él, porque tiene ángel, porque tiene imán, porque tiene magnetismo, porque le sabe llegar a la gente.
Claudia es muy inteligente pero es muy sosa, muy desabrida, muy parca. No ese tiene ese imán para controlar las masas. Llegará la Cuatro T pero sin partido, porque en pocos meses Morena no será nada.
Y aquí en Morelos, pues nunca ha sido nada, pues si el líder es Ulises Bravo, que ni es de aquí. Fíjense ustedes quiénes son los líderes.
Todo lo hicieron porque vino de México, todo lo ordenó Mario Delgado, todas las imposiciones, todas las porquerías que hicieron en el partido. Se adueñaron del partido de una manera asquerosa. Están mal y no hay nada que empiece mal y termine bien.
Por lo pronto, entre todos estos pendientes esperamos todavía, por ahí del día 14 o 15 de agosto la resolución del Tribunal Regional que tendrá que resolver sobre varias impugnaciones. Una sobre una diputación del VIII Distrito, en Xochitepec, entre otras, y la solicitud de nulidad de elecciones que pide Lucía Meza que aporta miles de pruebas, videos, fotografías, testimonios y audios sobre lo que ella dice y asegura que fue un fraude electoral.
Porque es inadmisible que se hayan ganado las principales ciudades del estado -Cuernavaca, Cuautla, Jiutepec, Xochitepec y Temixco, en las que, con tener esas se ganaba anteriormente la gubernatura- pero ahora no. La oposición ganó las principales ciudades pero perdió la gubernatura en los pueblitos.
Háganme ustedes el recabrón favor. Yo no lo digo, lo dicen sus abogados. Está presentada la impugnación. Aún no le entregan su boleta de mayoría a Margarita, pero, aunque se la entreguen, hay que esperar la resolución.
Y recordemos también que hay una pugna terrible entre el Poder Judicial y el Poder Ejecutivo federal. Puede haber sorpresas. Es una utopía, dicen los que saben.
Y yo lo reconozco que es una utopía muy lejana. Pero fue una utopía que el dios Huitzilopochtli haya dicho que los aztecas fundarían Tenochtitlan donde encontraran un águila devorando una serpiente. Y también fue una utopía que un cura desmadroso y borrachón, muy culto, quería que México fuera independiente, que se juntó con otros, como el Capitán Allende, como la Corregidora Domínguez y algún día soñaron que este país fuera libre de España y lo consiguieron. Les costó que luego les cortaran la cabeza y las colgaran en la Alhóndiga de Granaditas, pero lograron su utopía. Y fue una utopía que Juárez lograra las Leyes de Reforma separar el gobierno, de la Iglesia. Y se logró también la utopía de la Revolución Mexicana, en la que murió un millón de personas. Ahí está la Constitución con sus artículos tercero, veintisiete y ciento veintitrés.
De utopías está hecha la política.
No en balde Ernst Cassirer escribió ese maravilloso libro: El mito del Estado. Se los recomiendo.
Un abrazo a todos.