El CCE y su rara osadía a final del sexenio
Llamó la atención, nos comentan, el posicionamiento del Consejo Coordinador Empresarial, que encabeza Francisco Cervantes, en contra de la sobrerrepresentación. Y es que es sabido que el organismo empresarial no se había atrevido en mucho tiempo a llevarle la contra en ningún tema al Presidente. El CCE ha salido a pedir que el Instituto Nacional Electoral haga una asignación de pluris “mediante una interpretación sensata, justa, equilibrada y apegada a la Constitución y a la voluntad del pueblo de México”. Lo anterior, replicando argumentos de quienes consideran que debe impedirse una supermayoría. “Es fundamental que el INE… adopte una fórmula que refleje la diversidad política del país, garantizando que la Cámara de Diputados sea un órgano que represente fielmente la voluntad popular”, refirió. El pronunciamiento fue respondido ya por el Ejecutivo duramente: “Ya entiendan”. ¿Qué va a hacer con eso Cervantes? Uf.
Y resulta que se quedarán con las ganas tanto los que ya esperaban al presidente Javier Milei, para arroparlo y vitorearlo… como también los que seguramente iban a buscar el momento para enseñarle los dientes y no precisamente con una sonrisa. Es sabido que el mandatario de Argentina había sido invitado a participar en la Conferencia Política de Acción Conservadora, que contaría con exponentes de ultraderecha, y que se reuniría el próximo sábado en la Ciudad de México. Incluso esa agrupación encabezada por el actor Eduardo Verástegui había publicado ya en días pasados que la asistencia de Milei estaba confirmadísima. Sin embargo, lo que se informó ayer fue que Milei se reuniría el sábado con empresarios ganaderos en Rosario. En este espacio se dio cuenta de que a diferencia de la pomposa recepción que tuvo la adversaria del derechista, Cristina Fernández, por parte de la plana mayor de Morena, al argentino, en el mejor de los casos, le iban a aplicar un descarga de frialdad oficial.
Buena calificación a la maestra
Y fue el Gobierno del Estado de México, que encabeza Delfina Gómez, el que ayer informó que Moody’s ratificó la alta calificación que tiene la entidad, esto es, “AA-.mx” con perspectiva estable. Entre los indicadores relevantes que condujeron a que la calificación resultara favorable se encuentran: una amplia base económica y laboral, pero también una política fiscal proactiva que ha permitido el crecimiento de los ingresos propios, pasando éstos de ser equivalentes al 18.4 por ciento de los ingresos operativos en 2019 a 20.1 por ciento en 2023. Entre los principales factores de este desempeño se ubica el fortalecimiento de la recaudación del Impuesto Sobre Nómina, objetivo que se logró mediante inversión en tecnología para identificar contribuyentes, acciones para facilitar el pago de contribuciones y el nuevo sistema de subastas competitivas para la asignación de cuentas. Ahí el dato.
Con las decisiones tomadas ayer por parte de trabajadores y jueces, de estallar el paro de labores en el Poder Judicial, el tránsito de la reforma que impulsa la 4T ha entrado en un camino sinuoso. Se trata ya, claramente, de un choque entre el Poder Ejecutivo y la mayoría del Legislativo contra el Judicial. Las voces que se han pronunciado en este último han advertido que los diálogos que se iniciaron para tomarlos en cuenta al final fueron una simulación y resultarán, sobre todo, en la eliminación de facto de la carrera judicial sobre la que muchos trabajadores cifran su crecimiento salarial y profesional. Del lado del Legislativo, el senador Ricardo Monreal ha personalizado las acciones de trabajadores, jueces y magistrados en la ministra Norma Piña, a la que ayer responsabilizó de los “paros locos”, porque a su juicio no tienen razón ni fundamento. Ha anticipado, además, que “el procedimiento legislativo va a continuar, pero exhortó a los trabajadores y a la (ministra) presidenta a buscar el diálogo en lugar de estimular este tipo de paro de labores”. La situación está peliaguda.
El paro y las diferencias sindicales
Y hablando del conflicto por la reforma judicial, nos dicen que quien al parecer no es santo de la devoción de varios agremiados es Gilberto González Pimentel, líder del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación, que pidió abiertamente a sus representados no apoyar el paro de labores que iniciaron los servidores públicos del Consejo de la Judicatura Federal y, eventualmente, los juzgadores federales. Ayer, en las escalinatas de la sede judicial de San Lázaro en la Ciudad de México, donde se manifestaron trabajadores del Poder Judicial, bastó mencionar al líder para que, de inmediato, surgieran calificativos como “vendido”, “tibio” o “Judas”. Algunos incluso dijeron que están intentando ya desvincularse de la agrupación gremial. Patricia Aguayo Bernal, vocera de los trabajadores del Poder Judicial de la Federación, señaló que “él no nos representa y no dejaremos de decirlo”. Ayer mismo, en un comunicado del sindicato se llamó a no ir a paro a menos que la parte patronal no lo inicie y advirtió que “nadie está obligado a pensar igual que otros”.
Es en el equipo de la Presidenta electa Claudia Sheinbaum de donde surgen más pistas sobre los nombramientos que muy seguramente se darán a conocer en los próximos días. Y es que ayer sostuvo un encuentro con la mayor parte del Gabinete que a la fecha ya nombró, para definir sus objetivos al frente del país, según se informó. No obstante, nos comentan, llamó la atención la presencia de, al menos, dos personajes del espectro público que aparecieron en dicho encuentro: uno de ellos fue la secretaria del Medio Ambiente de la Ciudad de México, Marina Robles García, que a pregunta expresa sobre si ocupará un lugar en el gabinete respondió afirmativamente aunque, como debe ser, dejó que la incógnita sea despejada por la futura mandataria. “Sigo en el Gobierno de la ciudad, pero estoy participando en algunas de las reuniones para conocer cada una de las líneas, los enfoques y los proyectos prioritarios”, dijo en una entrevista breve. Otro que se apareció fue Andrés Lajous, secretario de Movilidad de la capital, quien aunque intentó escabullirse, no lo consiguió y fue visto. ¿Son los que siguen?