Son más importantes las causas que los momentos.
Florestán
Son más importantes las causas que los momentos.
Florestán
Los vaivenes simbólicos de la lucha política mexicana del siglo XIX inventaron a Hidalgo como indesafiable Padre de la Patria.
Primero, como autor de la Independencia, que no logró.
Luego, como precursor de la República, en la que no pensaba precisamente cuando se rebeló gritando por el monarca Fernando VII.
Siendo la seguridad de la población la razón de su creación y principal obligación del Estado, Sinaloa ilustra el fracaso estrepitoso de la cuarta transformación.
Una sociedad pusilánime es una sociedad decadente.
Florestán
La Independencia de México no la logró el cura Miguel Hidalgo, sino el militar criollo Agustín de Iturbide, en 1821.
Iturbide nada quería tener que ver con la rebelión de Hidalgo, ni con los insurgentes a quienes seguía viendo como forajidos.
Andrés Manuel López Obrador no reaccionó como supuso el expresidente Ernesto Zedillo a su demoledora disertación sobre la reforma constitucional al Poder Judicial.
Para él, las pruebas son un asunto solo de los demás.
Florestán
Madrid.- El jueves de la semana pasada escribí aquí:
Miguel Hidalgo y Costilla es hoy el anciano, venerable, Padre de la Patria, el padre de la independencia que los mexicanos fechamos en 1810.
Impulsor de las reformas que dieron plena independencia al Poder Judicial de la Federación y promotor de facultades genuinamente autónomas al Instituto Federal —hoy Nacional— Electoral, el ex presidente Ernesto Zedillo alerta:
Las del presidente López Obrador “enterrarán la democracia mexicana y lo que quede de su frágil estado de derecho”.
Están sacando lo peor de sí mismos.
Florestán
En el futbol se han dado casos en que un campeonato se define en penales y el perdedor siempre declara: perdimos por un penalty.