El nuevo Gobierno estatal acusa “corrupción” de mandos carcelarios; en sexenio de Cuauhtémoc Blanco se registran 4 revueltas en Cereso de Atlacholoaya, con saldo de 13 decesos
Tras un motín registrado en el Centro de Reinserción Social de Atlacholoaya, que dejó un saldo de un muerto y cuatro heridos, el Gobierno de Morelos informó que fueron destituidos todos los funcionarios con mando dentro del sistema penitenciario que provenían de la administración pasada, entre ellos el director operativo, Jesús Francisco Flores Jiménez.
En un comunicado, el Gobierno de la entidad indicó que ningún funcionario penitenciario de mando continuará al frente de sus labores, derivado de “los diversos señalamientos sobre presuntos actos de corrupción y abuso contra los internos”.
Lo anterior, dijo, con la finalidad de dar cumplimiento al interés superior de salvaguardar los derechos humanos, así como la seguridad de quienes se encuentran en ese espacio para lograr su reinserción a la sociedad.
El comunicado señala que el motín del pasado sábado por la noche se originó en el dormitorio B, derivado de disputas internas por el liderazgo y de inconformidades relacionadas con la permanencia de ciertos mandos operativos de la administración anterior.
Estos mandos, añadió, han sido señalados por presuntos “actos de extorsión vinculados al cobro para evitar traslados penitenciarios a otros Ceresos”.
Las autoridades agregaron que, durante el incidente, algunos internos recurrieron a la violencia y retuvieron contra su voluntad al personal de seguridad y custodia, lo que puso en riesgo su integridad física, además de que emitieron amenazas e incitaciones a la población restante, para realizar actos de agresión hacia las autoridades penitenciarias.
De acuerdo con reportes de medios locales, durante las acciones para controlar la situación dentro del penal, que se extendieron hasta la madrugada de ayer, el personal de custodia realizó disparos de arma de fuego.
Apenas el pasado martes, el secretario de Seguridad Pública de Morelos, Miguel Urrutia Lozano, había declarado que el nuevo Gobierno encontró “posibles intereses” de servidores públicos para evitar que se hicieran cambios para mejorar las condiciones en el penal de Atlacholoaya, entre ellos el servicio de comedor.
Durante el gobierno que encabezó Cuauhtémoc Blanco se registraron al menos cuatro motines o grescas al interior de este penal, con saldo global de 13 muertos y varios lesionados.
Los primeros registros que se tienen de hechos violentos al interior de este Cereso durante el sexenio anterior datan del 31 de octubre del 2019, cuando una riña dejó como saldo seis internos muertos y dos heridos. Entre los fallecidos se encontraba Raymundo Isidro “N”, alias El Ray, líder regional del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Dos días después se registró otra pelea, tras la cual un interno resultó muerto y dos heridos, mientras que un grupo de reos tomó por asalto el área de ingresos y sometió a una decena de custodios.
Estas dos disputas con dos días de diferencia generaron que los custodios del penal iniciaran un paro indefinido de labores, el cual levantaron hasta que las autoridades del penal fueron destituidas y se reubicó a los internos que generaron los hechos violentos en las jornadas previas.
El 1 de julio del 2020 la Comisión Estatal de Seguridad (CES) confirmó la muerte de cuatro internos como resultado de una riña en el área de ingresos del mismo Cereso de Atlacholoaya, ubicado en el municipio de Xohitepec.
Y el cuarto suceso en la gestión de Cuauhtémoc Blanco ocurrió el 9 de marzo del 2021, cuando la Comisión de Derechos Humanos de Morelos (CDHM) confirmó el fallecimiento de un interno que participó en un enfrentamiento, en el cual también hubo seis lesionados.
Documentan hacinamiento
En su Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2023, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos documentó violaciones a la normatividad interna, hacinamiento, sobrepoblación, deficiencias en los servicios de salud y ausencia de actividades deportivas, entre otras irregularidades en este penal.
En el documento, el órgano autónomo le dio una calificación de 7.3 al sistema penitenciario del estado de Morelos, uno de los más bajos del país.
Ayer, familiares de internos del penal de Atlacholoaya realizaron un acto de protesta afuera del lugar, en demanda de que se informara sobre lo que ocurrió durante la noche y la madrugada, y de que se les permitiera ingresar a la visita dominical.
Sin embargo, autoridades del Gobierno estatal decidieron suspender la visita durante todo el día, con el argumento de que de permitirla, se ponía en riesgo la seguridad de los propios visitantes.
Ante tal situación, familiares de internos, todos vestidos con camisetas rojas, bloquearon el acceso principal del Cereso, con lo que impidieron que los custodios que terminaban su turno salieran de las instalaciones. Los inconformes fueron contenidos por elementos de la Policía Estatal.