Ubicó a los políticos, más allá de sus partidos, como ‘‘responsables de sus actos’’. Se mostró en contra de la segunda vuelta en comicios presidenciales. También habló de su insatisfacción con los resultados obtenidos hasta ahora en el tema de la seguridad y explicó el porqué de la oposición a la reforma educativa, porque rompió ‘‘con una gran cantidad de privilegios que tenían algunos sectores en el ámbito magisterial’’.
Respecto a la todavía polémica presencia de Donald Trump a fines de agosto en México, a invitación de su gobierno, respondió: ‘‘Creo que la forma de hacerlo y de haberlo instrumentado hubiese sido distinta, de una manera distinta a cómo la hice, y como tal asumo la responsabilidad de haber abordado el tema’’.
Al invitarlos –dijo el mandatario– nunca propuso recibirlos en México. ‘‘Y por supuesto que lo volvería a hacer con ambos candidatos, no en la forma en la que lo hice, en que se instrumentó’’.
Justificó la misiva a los candidatos de Estados Unidos para entablar un diálogo, sobre todo a partir de las aseveraciones y postulados agresivos de Trump, y eso generaba ya presión e incertidumbre en México. Llamó la atención sobre un hecho ‘‘curioso’’: hoy, cuando caen las preferencias electorales por el republicano, ‘‘el peso se nos viene apreciando’’, y ocurría lo contrario con la moneda mientras aquél crecía en la intención de votos.
En un foro organizado por el Grupo Interacciones-Bloomberg, el mandatario también habló sobre el gobernador con licencia de Veracruz, Javier Duarte, acusado penalmente por diversos delitos relacionados con las finanzas de la entidad. Serán las instancias correspondientes las encargadas de definir, dijo, si ese político, ‘‘y en otros más señalados, hay o no responsabilidades’’. Cada actor político –indicó– sin importar el partido donde milite, ‘‘es responsable de sus propios actos’’.
Defendió a su partido, el PRI donde milita, en el cual desde ayer fue expulsado Duarte de Ochoa, porque ésta ‘‘es una renovación interna, un entreveramiento generacional’’.
En otro tema, el mandatario reiteró que es contrario a la posibilidad de establecer la segunda vuelta electoral en comicios presidenciales. ‘‘Resulta una ficción’’ plantearla como la vía para alcanzar gobernabilidad y construir mayorías. Además, indicó, cuando faltan menos de dos años para la siguiente elección presidencial introducir la segunda vuelta no es conveniente.
‘‘Creo que éste no es el momento oportuno para pretender hacer un cambio en nuestro régimen político-electoral por la distancia a que estamos de la elección’’, dijo. Y ahí mismo recordó su propuesta de recortar a 400 el número de diputados a través de ajustar la representación proporcional, ‘‘y tampoco se abrió ese debate’’.
Sobre el tema de la seguridad, aunque admitió que ‘‘tenemos mucho que avanzar’’, también habló de ‘‘percepción y realidad’’. En el sexenio anterior, el crecimiento de la criminalidad ‘‘fue notable’’, y ahora ‘‘ha habido una reversión real de esta tendencia’’, pero, admitió, no se ha logrado romper la barrera de 17 homicidios por cada cien mil habitantes (en el periodo anterior esa proporción fue de 23).
Asimismo, insistió en la expectativa de ver los ‘‘frutos’’ de la reforma educativa en 10 o 15 años y tener a las primeras generaciones de egresados con un nuevo modelo. ‘‘No es la oposición, no es la resistencia, no son las manifestaciones. Claro que hay resistencia cuando se rompe con una gran cantidad de privilegios que tenían algunos sectores en el ámbito magisterial.
‘‘Cuando rompes con ello, cuando se acaban esas prebendas, cuando dejan de venderse, de heredarse, plazas de maestros, cuando hoy tienen que someterse a evaluación de su desempeño para su promoción, por supuesto que se generan resistencias incluso entre quienes las aceptan’’, expuso.