La exigencia del Congreso de Morelos para que Cuauhtémoc Blanco Bravo solicite licencia al cargo de alcalde de la ciudad de Cuernavaca, "antes de que avancen sus conflictos jurídicos" muestra que es un asunto político y no un tema jurídico, el que impulsa a los legisladores locales, aseguró el senador perredista, Fidel Demédisis Hidalgo.
El secretario de la Comisión de Federalismo del Senado de la República consideró que el punto de acuerdo es un despropósito, que al no estar fundamentado, se convierte "en un acto de intromisión y un abuso" que Blanco no debe aceptar, a menos que los legisladores tuvieran elemento legales suficientes para promover la destitución del ex futbolista.
"De otra manera estamos asistiendo al ejercicio abusivo de la política y la evidente intromisión entre poderes, aunado al desconocimiento de la ley", comentó Demédisis.
La semana pasada, las fuerzas políticas que integran el Congreso estatal, aprobaron un punto de acuerdo para pedirle a Blanco dejar el cargo, para que atienda sus asuntos personales convertidos en jurídicos, como las denuncias penales en su contra y el tema del contrato de los siete millones de pesos, ya que al atenderlos se distrae de sus actividades oficiales.
Ante esto, Blanco no sólo desdeñó la propuesta de los diputados, sino que también les exigió "dejarse de tonterías" y que en lugar de dicha partición, busquen la forma de ayudarle a Cuernavaca en la búsqueda de recursos económicos federales.
"Ese es un asunto (la petición de los diputados) que no tiene ni pies ni cabeza. Si quieren actuar responsablemente (los diputados) pues que fundamenten jurídicamente su solicitud, y no necesitaran pedirle nada a Cuauhtémoc. Simplemente lo destituyen si tienen los elementos jurídicos correspondientes, y punto", añadió.