Tras negar que alcalde piense en las elecciones de 2018, el secretario general del Ayuntamiento de Cuernavaca, Guillermo Arroyo Cruz, aseguró que la pretensión del Congreso del Estado de revocar el mandato a Cuauhtémoc Blanco “no nos afecta en cuanto al trabajo”; sin embargo, dijo que esperarán a que se emplace al municipio y rechazó que se haya obligado a burócratas a participar en la marcha a favor del edil.
Enfatizó que las tareas de la Comuna continúan de manera normal y rutinaria. “Seguimos empeñados en decirle a la ciudadanía que trabajamos en favor de Cuernavaca”.
Agregó: “Esperaremos los tiempos procesales para poder establecer una estrategia de defensa adecuada en beneficio del alcalde y que redunde en ganancias para la ciudad, (…) hay expresiones sociales en las calles que piden dejar trabajar al presidente municipal”.
Una vez que el Congreso local dio entrada a la petición que hicieron 10 de los 15 regidores del municipio para destituir a Blanco Bravo, indicó que no han sido “ni siquiera emplazados, entendemos que el Poder Legislativo pareciera que va rápido y con ansiedad en caminar en este tema con mucha celeridad, pero creemos que debería tratársele como a cualquier otro asunto”.
Rechazó que el alcalde busque alguna aspiración para el proceso electoral de 2018, porque “él no está ocupado en las encuestas, sino empeñado en sacar adelante a la ciudad de Cuernavaca y cumplirle a todos los ciudadanos”.
Por otro lado, Arroyo Cruz negó que se haya obligado a los trabajadores del Municipio a marchar a favor del alcalde y llevar al menos a diez acompañantes.
“Lo desmiento enfáticamente; el Ayuntamiento capitalino no le pidió a ningún trabajador eso. Es una expresión limpia de la gente que ha manifestado su apoyo”.
Sin embargo, en la congregación de ayer, líderes sindicalizados con listas en mano, tomaban asistencias y amenazaron que quien no participara sufriría consecuencias.