Cd. de México (11 diciembre 2016).- Una década después, el parte de guerra arroja más de 174 mil muertos, casi 30 mil desaparecidos, al menos 50 mil huérfanos, un número no cuantificado de lisiados y un costo al erario que supera los 1.8 billones de pesos.
Sin embargo, en la última década, la violencia se ha recrudecido, los índices delictivos no han bajado, ha aumentado el consumo de drogas y, aunque se ha detenido a más de 30 capos, los cárteles siguen disputándose las rutas del narcotráfico.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el sexenio de Felipe Calderón ocurrieron 104 mil 794 homicidios dolosos, a los que se suman los 69 mil 854 en los primeros cuatro años de Enrique Peña.
Además, en estos 10 años, 29 mil 198 personas han desaparecido, aunque organizaciones civiles elevan la cifra a 50 mil casos.
La estrategia contra el crimen ha implicado mayor gasto en seguridad nacional, que pasó de 102 mil millones de pesos en 2007 a 248 mil millones en 2016.
La "guerra" no pudo contener los índices delictivos, que en 2016 tuvieron un repunte, según el Inegi, ni evitó "que la droga llegue a tus hijos", como se proclamaba en el calderonismo.
La Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes 2014 reveló que 1.7 millones de alumnos de secundaria y 152 mil de quinto y sexto de primaria probaron alguna droga ilegal.