Debido a un contexto internacional complicado, así como a la incertidumbre que ha generado la política que implemente la nueva administración en Estados Unidos (EU) encabezada por Donald Trump, tanto el Banco Mundial, como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) revisaron a la baja sus perspectivas de crecimiento económico para México.
En su informe “Perspectivas económicas mundiales”, el Banco Mundial estima que la disminución de la inversión en México, derivada de la incertidumbre política en EU, tendrá como consecuencia una desaceleración moderada de la economía en 2017, con un crecimiento de 1.8 por ciento, por debajo del 2.8 por ciento estimado previamente y del 2 por ciento contemplado para 2016.
La institución internacional considera que el consumo privado será más sólido, apoyado por bajos niveles de inflación, desempleo, mayores salarios reales y los flujos que se reciben de remesas, al tiempo que destacó que la recaudación tributaria ha mejorado, al igual que el déficit fiscal.
El estudio refiere que en virtud del enorme papel que desempeña EU en la economía mundial, los cambios en la orientación de las políticas pueden dar lugar a una reacción en cadena. A corto plazo, considera que unas políticas fiscales más expansivas pueden suponer un crecimiento mayor en ese y otros países, pero los cambios en materia comercial y en otras políticas pueden neutralizar esos beneficios, y un elevado nivel de incertidumbre en las principales economías también puede repercutir negativamente.
TASA SOSTENIDA
La OCDE señaló que el contexto mundial es complicado y que México ha tenido que enfrentar vientos en contra, como el colapso de los precios del petróleo, una política monetaria restrictiva en EU y una depreciación importante del peso, a lo que se suman expectativas de cambios en las políticas de comercio exterior que crean riesgos e incertidumbre.
Ante este escenario, la OCDE revisó a la baja sus previsiones de crecimiento económico para México, a 2.2 por ciento en 2016, 2.3 en 2017 y 2.4 por ciento en 2018; sin embargo, considera que es necesario alcanzar una tasa sostenida de 5 por ciento para reducir la desigualdad.
En conferencia con medios para presentar el “Estudio Económico de México 2017”, el secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría, dijo que el país sigue creciendo a un paso moderado pero constante, impulsado principalmente por la demanda interna y el efecto positivo de algunas reformas estructurales, como la de telecomunicaciones, y la expansión del crédito, pero limitada por menores inversiones y un comercio internacional que no está funcionando.
Sin embargo, “no podemos crecer a esas tasas con los niveles de pobreza y desigualdad que tenemos hoy en día, con los desequilibrios de productividad de nuestro sector empresarial, hay que romper ese círculo vicioso”, dijo.
Es por ello, explicó, que el estudio del organismo central se enfoca en cómo incrementar la productividad y promover un crecimiento más incluyente, al aumentar los desafíos para México.
Agregó que ahora las políticas económicas tienen que enfocarse en la redistribución de oportunidades, educación, capacitación y del ingreso, entre una economía altamente productiva y una tradicional con baja productividad, con una edistribución de recursos productivos, más acceso al crédito y apoyos para el desarrollo tecnológico e incentivos para fomentar la formalización y la equidad de oportunidades entre hombres y mujeres.
El secretario general de la OCDE señaló que para avanzar en las metas, es necesario construir un país mar incluyente, productivo y exitoso.
CLAVES
CONCIERTO MUNDIAL
Para la economía internacional, el Banco Mundial ve una aceleración de 2.3% en 2016 a 2.7% en 2017.
En las economías avanzadas estima que el crecimiento repunte hasta 1.8% este año. El BM considera que el estímulo fiscal en ellas y, en particular en EU, puede generar un crecimiento más rápido.
La institución destaca que una creciente protección comercial es probable que tenga efectos adversos.
INTERVINO EL BANXICO CON 2 MIL MDD
El Banco de México (Banxico) informó que destinó 2 mil millones de dólares para las operaciones de venta directa de esa moneda, anunciada por la Comisión de Cambios, en bancos de nacionales y del extranjero para amortiguar la caída de peso por la volatilidad en el mercado cambiario.
La Comisión de Cambios —integrada por funcionarios de Hacienda y del Banxico— en su comunicado del pasado 5 de enero, dejó abierta la posibilidad para repetir la acción de venta directa de dólares, si las condiciones del mercado cambiario lo requieren, sin dar detalles.
Debido a la intervención las reservas internacionales sufrieron una reducción de mil 816 millones, así el saldo en la semana que terminó el 6 de enero fue de 174 mil 726 millones de dólares, informó Banxico.
La cantidad de billetes, monedas y depósitos bancarios disminuyó en 11 mil 387 millones de pesos, con lo que alcanzó un saldo de 1.4 billones de pesos, lo que significa una variación anual de 15.3 por ciento. Banxico estimó que este comportamiento es congruente con el patrón estacional de la demanda por base monetaria.
Con información de: Alejandro Ramírez/México.