El inicio de año no pinta bien para México.
Así lo demuestra el Índice de Confianza del Consumidor (ICC), que en enero cayó 17.9 por ciento, su peor resultado desde que se tiene registro.
Esta variación negativa lo llevó a 69.3 puntos, de acuerdo con cifras ajustadas por estacionalidad del Inegi.
Para los analistas, las principales causas que impactaron negativamente en el índice son muy claras: la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos el 20 de enero, sus advertencias contra México, las dudas respecto a las políticas que planea instrumentar y el gasolinazo.
Además, la confianza del consumidor fue afectada por las presiones inflacionarias, que se hicieron más evidentes al inicio del año, dijo Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base.
Explicó que el alza en los precios de las gasolinas llevó a la inflación de la primera quincena de enero a 4.8 por ciento, lo que superó por mucho el objetivo del Banco de México de 3.0 por ciento; incluso rebasó el rango más alto de oscilación, que era de 4.0 por ciento.
Alejandro Cervantes y Francisco José Flores, economistas de Banorte-Ixe, consideraron que el desplome de enero se debió al aumento en el precio de las gasolinas.
También indicaron que incidieron la incertidumbre respecto al desempeño económico de México generado por las políticas económicas que implementará Donald Trump y la depreciación que había acumulado el tipo de cambio en la primera quincena del mes.
Según datos del Inegi, de cinco variables que integran el índice, las expectativas sobre la condición económica del País esperada para un año respecto a la situación actual fueron las que más cayeron en enero, con 23.6 por ciento, tras su alza de 1.3 en diciembre.
La segunda que más bajó fue el rubro sobre las posibilidades actuales de los integrantes del hogar para comprar bienes durables, como automóviles, casas o electrodomésticos, que, comparado con el año pasado, tuvo un declive de 23.5 por ciento.
La variable sobre la percepción de los consumidores acerca de la situación económica actual del País comparada con la que prevaleció hace 12 meses cayó en 22.6 por ciento.
El rubro que mide la expectativa sobre la situación económica de los miembros del hogar dentro de 12 meses respecto a la que registran en el momento actual bajó 15.6.
Después de dos avances mensuales, el indicador que mide la opinión sobre la situación económica de los integrantes del hogar en el momento actual frente a la que tenían hace 12 meses descendió 9.7 por ciento.