Analistas y politólogos aseguraron que los recientes cambios realizados en el PRI obedecen a una reestructuración interna de cara a los comicios de este año, para mantener la unidad y, sobre todo, tienen como meta la elección presidencial de 2018.
Coinciden en que no significan un cambio de imagen, sino un reacomodo entre los grupos del tricolor.
“Son reacomodos que tienen que ver menos con la imagen externa por las críticas hacia el ex gobernador José Murat, quien se perfilaba para la CNOP y ahora va a la Fundación Colosio. Él no tiene una buena imagen, estos cambios son más bien reacomodos internos de grupos y personales que han colaborado con este gobierno y requieren un espacio”, aseguró el politólogo José Antonio Crespo.
El también investigador del CIDE aseguró que la llegada de Claudia Ruiz Massieu —sobrina del ex presidente Carlos Salinas de Gortari— a la secretaría general del PRI parece un “premio de consolación, porque la tuvieron que mover de la Secretaría de Relaciones Exteriores, tras la elección de Donald Trump en Estados Unidos.
“No veo que quieran dar un mensaje hacia afuera, más bien el mensaje hacia afuera implica un costo; es decir, ¿qué hace José Murat ahí todavía, como un personaje de primera línea? Con Ruiz Massieu se podría pensar que hay una mujer en un cargo importante”, dijo.
El politólogo José Fernández Santillán dijo que los cambios eran necesarios porque, a horas del 88 aniversario del PRI y tras los comicios del año pasado, se ve “muy desdibujado”.
“Lo veo muy desdibujado, porque en las últimas elecciones estatales le fue muy mal. Aunque el PRI conserva la mayoría de las gubernaturas, ha ido cediendo terreno y es hora de que la buena política regrese al PRI”, dijo.
El académico del TEC de Monterrey aseguró que los cambios obedecen a una estrategia para conectar al partido con la base militante, pero más con la base social, pues hay un divorcio de todos los partidos con la ciudadanía.
Consideró que no se dejó de lado al ex gobernador Murat, ya que en la Fundación Colosio tendrá que trabajar por recuperar la identidad e ideología revolucionaria priísta.
Alberto Aziz Nassif, profesor e investigador del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), afirmó que los cambios obedecen a una lógica de acomodo interno, más que a enviar un mensaje o a buscar una nueva imagen.
“Todos los cambios que se hacen en los partidos tienen una intención de renovar al personal directivo; en el PRI yo creo que se están conformando los equipos rumbo a las elecciones de 2017 y esto no quiere decir que será el equipo que vaya a organizar la sucesión presidencial en 2018”, dijo.
Recordó que desde que la canciller, Claudia Ruiz Massieu salió de la SRE se conoció que le habían ofrecido un cargo al interior del PRI: “Hoy se cumplió o ella aceptó ser parte del equipo dirigente que comanda Enrique Ochoa. La intención con la renovación de sus cargos es, tal vez, generar una mejor imagen, pero lo principal es una mejor estrategia organizativa, porque el PRI está de capa caída y bajo en legitimidad, porque cuando tiene la Presidencia el jefe del partido es el Presidente… el problema es que la aceptación del presidente Peña Nieto está bajísima y eso acarrea al PRI graves problemas”.
Dijo que Murat no genera imagen de renovación y de nuevos cuadros dentro del PRI y por ello fue enviado a la Fundación Colosio, ya que “a pesar de que los priístas son disciplinados, siempre hay negociaciones al interior”.
El analista Fernando Dworak dijo que los cambios son para mantener la unidad interna rumbo a la elección del candidato presidencial y, por tanto, ser competitivos en 2018.
“Están hablando de unidad entre varios grupos. A Murat, quien tiene mucho de lo negativo del viejo PRI, pero es un operador político, no lo dejaron fuera y le dieron la Fundación Colosio como un premio de consolación”, dijo.
Recordó que a diferencia de otros partidos, el PRI se caracteriza por su disciplina interna. Añadió que se acomodaron rostros jóvenes —Ruiz Massieu, Monroy y Zamora— que representan a familias políticas importantes como una apuesta por el cambio.
Aziz Nassif dijo que renovar sus puestos internos no significa que el priísmo tendrá éxito en los comicios entrantes, mientras que José Antonio Crespo señaló que los cambios no salvan al PRI de la situación frente al electorado en las elecciones de este año y las que vienen el próximo.