El nuevo dirigente de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP), Arturo Zamora, afirma que su partido, el Revolucionario Institucional, “no está en la lona” de cara a las elecciones en el Estado de México, Coahuila y Nayarit, ni rumbo a la Presidencial de 2018, para las que adelantó triunfos.
En sus oficinas del Senado, Zamora Jiménez luce sus habilidades para jugar al balero. En el primer tiro que hace ensarta la pieza de madera y hace un capirucho. Pero también presume las “fortalezas de su partido. En la elección de 2016 el PRI tuvo más votos que cualquier otro”.
En entrevista con EL UNIVERSAL, elude responder por qué el PRI dejó fuera al ex gobernador de Oaxaca José Murat, quien al último minuto declinó su aspiración de dirigir la CNOP.
En enero con el gasolinazo se desplomó el PRI y subieron los bonos de López Obrador y Margarita Zavala. ¿El PRI está en la lona?
—No. Cada quien da su lectura. Los partidos de oposición eso es lo que han tratado de manifestar.
¿En qué basa su optimismo?
—En la elección de 2016, si tomamos en cuenta el voto unitario para gobernador por partido político, el PRI tuvo más votos que cualquier otro partido. Es cierto, en mayor número perdimos gubernaturas, pero también ganamos ocho Congresos locales y prácticamente más de 50% de los municipios. El voto nos mantiene. No estamos en la lona, al contrario.
También tenemos una visión de Estado clara, en la que por medio de la estrategia electoral basaremos nuestro trabajo de cara al desafío electoral de este año y de 2018. Para esto era necesario poner al día toda la estructura del partido.
¿Cómo va a llegar el PRI a 2018?
—El PRI llegará fuerte a 2018 porque tiene una estructura en todo el país, que con la dirigencia del doctor Enrique Ochoa se ha renovado. Ha nombrado 12 nuevos delegados; tiene varias estructuras en entidades federativas. El gran reto antes de 2018 es ganar las tres elecciones por los gobiernos del Estado de México, Coahuila y Nayarit, y los municipios de Veracruz.
¿Cuál es el análisis que hacen después de la derrota en las elecciones de 2016?
—Cada elección te da una experiencia. Entonces tenemos que saber muy bien que hay instrumentos de trabajo para el panorama que a veces no son certeros, como las encuestas. Otro tema importante es mantener la unidad. También saber crear coaliciones estratégicas con otros partidos y a partir de la experiencia de 2016, sin duda hemos hecho los ajustes, por ejemplo, para lograr en el Estado de México una colación con el PES, PVEM, y Nueva Alianza, o en Coahuila, con siete partidos.
¿Con la elección del Edomex, el PRI se juega su sobrevivencia?
—Con la elección del Estado de México, que vamos a ganar, se va a establecer la base de la plataforma para 2018”.
¿Cómo está la caballada del PRI rumbo a 2018?
—Tenemos personajes de la vida pública muy competitivos; somos un partido con variedad de prospectos para la sucesión presidencial. Pero no me puedo referir a ninguno porque en el cargo que tengo debo brindar apoyo a quien mi partido decida.
¿AMLO es un peligro para el PRI?
—López Obrador desde hace muchos años está en una campaña descarada. Quien quebranta las normas no estará dispuesto a respetarlas en su momento. La sociedad y los mexicanos nos vamos a dar cuenta, otra vez, de la personalidad de quien puede gobernar el país frente a los retos internacionales. Es muy importante reconocer qué va a necesitar México, qué valores y qué tipo de persona para el Ejecutivo.
¿Para el PRI quién es el adversario más fuerte?
—Para el PRI todas las oposiciones son adversarios. Pero son ellos quienes nos ven como el adversario a vencer y nosotros debemos ser sumamente inteligentes, estratégicos y cuidadosos.
¿Cómo se siente con su nueva encomienda al frente de la CNOP?
—Contento y agradecido con todos los cenopistas del país, sumamente reconocido porque el presidente [del partido] Enrique Ochoa me admitió la renuncia como secretario de Organización y, por supuesto, esto me facilita estar en uno de los tres peldaños más importantes del partido.
¿Cuál será su plan de trabajo?
—Tenemos un programa muy importante de apoyo a los migrantes, a quienes envían sus remesas, de defensa de los derechos de los mexicanos en el extranjero, entre otros aspectos.
¿Con la crisis de credibilidad, el PRI olvidó a sus bases sociales?
—Estamos reconociendo muchas cosas, una de ellas es que debemos permanecer en contacto con las demandas de la sociedad. Debemos ser muy cercanos a la sociedad que está demandando y reclamando cada día mejores respuestas de los partidos políticos.
¿Cómo reinventarse, si se ha visto a las bases como fuente de votos?
—Estamos cambiando y tenemos que cambiar, buscar una estrategia diferente en pos de la confianza de los demás. Para que esto ocurra tenemos que modificar gran parte de nuestra estructura; en este caso, reinventar a la CNOP, tenemos que reorganizarla y estar cerca de las propuestas de la sociedad.
¿Por ello el PRI lo eligió a usted y no a José Murat?
—Se emitió una convocatoria y solamente me inscribí yo, he cumplido con todo lo que demanda. Esperamos que la experiencia en elecciones y en el CEN del PRI se ponga al servicio de uno de sus órganos principales.
¿Murat tenía muchos negativos?
—Hasta donde sé, el ex gobernador declinó inscribirse. Te hablo de mí porque uno de los requisitos es tener las cualidades para el desempeño.
¿Cómo ayudará la CNOP a bajar las decisiones del gobierno?
—Sabrá trabajar muy cerca del Ejecutivo para reconstruir su esencia.
¿Cuál es el futuro de la CNOP?
—Los sectores obrero, campesino y popular tenemos una gran oportunidad. Voy a aportar experiencia.