En el marco del día internacional de la mujer, el gobernador del estado, Graco Ramírez Garrido Abreu, convocó a este sector de la población a trabajar para lograr su empoderamiento; además, afirmó que el Poder Legislativo y Judicial lo encabezan mujeres, por lo que las invitó a tomar el Ejecutivo.
Acompañado por su esposa, Elena Cepeda de León, Graco Ramírez refirió que en sus primeros cuatro años de gobierno se ha tenido la oportunidad de impulsar a las mujeres. Sin embargo, expresó que no está satisfecho, porque aún hay cosas por hacer, por lo que va a “empujar más fuerte” la defensa de sus derechos.
Recordó que su gabinete cumple con la equidad de género y agregó que las políticas públicas de Morelos son para fortalecer a las mujeres; aseveró que la Beca Salario es un ejemplo que ha permitido que 12 por ciento más de mujeres estudien en la entidad.
Resaltó que antes, las víctimas de la violencia de género no encontraban justicia, sino una doble victimización al acudir ante el Ministerio Público; sin embargo, comentó que hoy esa situación ha cambiado, porque una mujer agredida es candidata a perder la vida.
“Es realmente grave lo que vivimos en esa materia, es inaceptable la violencia, porque lamentablemente es una parte cultural negativa de nuestra forma de ser”, expresó.
“Si hay presidenta del Congreso, si hay importantes dirigentes sindicales, si hay presidenta del Tribunal de Justicia, si la mitad del Gobierno son mujeres, qué esperan, les falta una (gobernadora); adelante, ustedes tienen la palabra”, finalizó.
Las políticas públicas de Morelos son para fortalecer a las mujeres: Graco Ramírez, gobernador. Foto: HAIDEE GALICIA
Hay que romper paradigmas
La jefa del Departamento Estatal de Enfermería, Norberta López Tarango, destacó que en estos tiempos las enfermeras en México no han tenido el reconocimiento debido, aunque en 2012 se destacó en Morelos la labor de estos empleados.
Detalló que en el estado cuenta con 4 mil 559 enfermeras, de las cuales dos mil 372 laboran en los Servicios de Salud. El Gobierno estatal les ha dotado de becas para que se especialicen, pero necesitan más apoyos, porque se tratan de postgrados de tiempo completo; “aún nos vemos limitadas, porque somos mujeres que tenemos varios roles: ser mamás, ser amas de casa, entre otros. Creo que existe la necesidad de no sólo trabajar la parte técnica y disciplinar, sino también en el desarrollo humano”.
“Hoy podemos levantar la voz y decir con orgullo que Morelos cuenta con enfermeras talentosas, que su contribución científica se ve reflejada en el Centro Nacional de Excelencia Tecnológica en Salud, por la publicación de tres guías de práctica clínica, incluidas en el catálogo maestro, para consulta mundial”, añadió.
Enfatizó que faltan enfermeras de alto nivel, de manera que el reto será alcanzar la consideración de las autoridades para empoderar a las profesionales de dicha rama.
“Tenemos que luchar y seguir implementando retos. Hay que romper paradigmas, es difícil pero no imposible. Hemos logrado espacios; estoy segura que si nos unimos y cada quien desde su trinchera hace lo que le corresponde, tendrán que voltearnos a ver a fuerza”, concluyó.
Es momento de actuar contra feminicidios
Por su parte, Flor Desiré León Hernández, activista del movimiento feminista Comunicación, Intercambio y Desarrollo Humano en América Latina (CIDHAL), indicó que se trata de actuar y dejar de lado el discurso gubernamental.
Precisó que se registraron 530 casos de feminicidios en 13 años, mismos que sirvieron para que la Comisión Independiente de Derechos Humanos empujará la Alerta de Violencia de Género (AVG) en Morelos, aprobada en agosto de 2015.
Expuso que en 2016 se alcanzaran casi 700 feminicidios, y que los 10 municipios con mayor numero de incidencia de este crimen son: Cuernavaca, Jiutepec, Temixco, Cuautla, Yautepec, Xochitepec, Puente de Ixtla, Emiliano Zapata, Tepoztlán y Jojutla.
Explicó que en lo que va del 2017 son cerca de 20 víctimas de feminicidio; “ante esta realidad, es necesario cuestionarnos qué nos está pasando. Hablamos de la vida de las mujeres, ésta es una situación que deja huellas múltiples en el entorno familiar y en el tejido social”.
Expresó que las mujeres han normalizado la violencia, la guerra, la pelea y la discriminación, acostumbrándose la dolor. Por esta razón, llamó a la sociedad a poner un alto y reconocer que la AVG debe ser un esfuerzo local, que las ocho localidades en las cuales existe la declaratoria asuman seriamente, con recursos humanos capacitados y financieros, este problema.
Finalmente, mencionó que es imprescindible crear un modelo alternativo, una propuesta afirmativa cultural en favor de la vida de las mujeres.