El fundador y ex militante del PRD propone una nueva constitución federal con un gobierno que parta de los ciudadanos y un modelo económico que reemplace al neoliberal.
Cuauhtémoc Cárdenas, el fundador y ex militante del PRD, presentó los lineamientos generales de Llamado a México, su proyecto de nación, que tiene por objetivo redactar y promulgar una nueva constitución federal con un gobierno centrado en los ciudadanos y un modelo económico que reemplace al neoliberalismo para que el Estado "recupere su papel en la conducción económica del país" y en beneficio de la colectividad.
El documento propone lo siguiente:
La participación ciudadana como clave del Estado
La participación social es la premisa de las instituciones: los ciudadanos deberán involucrarse de manera efectiva en las propuestas, el diseño y la evaluación de las políticas públicas en los tres niveles de gobierno.
Se privilegian los mecanismos de democracia directa como la consulta popular, el referendo, el plebiscito y la iniciativa popular.
El presidente de la República no participará en la designación de los ministros de la SCJN o de los consejeros del Consejo de la Judicatura Federal.
La sociedad "por medio de una consulta directa" dará su opinión sobre los candidatos.
Los procuradores de justicia, federales y estatales, serán electos directamente por los ciudadanos "sin la participación de los partidos".
El Estado reconocerá a los derechos humanos como axioma: "El Estado debe refundarse desde la perspectiva de los derechos humanos". En este sentido, se reconocen los derechos de las mujeres, niños y jóvenes, pueblos originarios, adultos mayores, personas con capacidades diferentes, migrantes y personas con "orientación sexual diversa".
Además de reconocer el carácter progresivo de los derechos humanos, el gobierno debe proveer recursos para ejercerlos y asegurar su ejercicio.
Al respecto, el Estado también deberá cumplir con las recomendaciones de la ONU en esta materia y apoyar a los organismos internacionales.
Los consumidores participarán activamente en el establecimiento de precios y tarifas de los energéticos, tanto de las gasolinas como de la electricidad.
El Estado se sujetará a un recorte drástico de los salarios de la alta burocracia, se suprimirá el gasto "indignante y absurdo" en publicidad oficial y se eliminarán las escoltas para los funcionarios, así como "otras partidas que seguramente pueden reducirse".
Terminar la "guerra contra el narco"
El proyecto de nación expone que la intervención de las fuerzas armadas en la seguridad pública, por lo que exige el regreso del Ejército, la Marina y las Fuerzas Áreas de México a sus cuarteles, así como la profesionalización y capacitación de los cuerpos policiacos.
El combate al narcotráfico no deberá limitarse a la seguridad, sino que deberá pensarse también como problema de salud pública. En especial, el proyecto identifica que el reclutamiento del crimen organizado se debe a la "miseria" de la economía campesina, al desempleo y a la falta de oportunidades para los jóvenes.
También reconoce la legalización del consumo de la marihuana y propone un debate público sobre las llamadas "drogas duras".
Rechazo al neoliberalismo y recuperación de los recursos naturales de la nación
El proyecto de nación propone abandonar la política económica neoliberal que "inició con la firma del TLCAN y culminó con la privatización de los hidrocarburos".
Buena parte del documento se posiciona a favor de la recuperación de la producción, explotación y refinación del petróleo.
Se suspenderá el 'gasolinazo" y se congelarán los precios en los niveles que presentaban en diciembre de 2016.
El nuevo modelo económico buscará reducir la dependencia con Estados Unidos por medio del fortalecimiento del mercado interno, el incremento del consumo nacional, el decremento de las exportaciones y el crecimiento de la capacidad y calidad de la inversión.
También se propone el incremento de la producción nacional para disminuir las importaciones.
Al respecto, se promoverá la industrialización del país y el incremento del valor agregado de las manufacturas y materias primas.
El Estado brindará acceso universal a la energía eléctrica de buena calidad y bajo costo. También se priorizará la inversión en energía sustentable.
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Además, el Estado acotará el poder del capital financiero para reorientar la economía a las actividades productivas y colectivas.
Se asignarán créditos, subsidios e incentivos al campo para que recupere su potencial productivo y se asegure la "soberanía alimentaria".
El proyecto hace especial hincapié en un modelo económico que no ponga en riesgo al ambiente ni a los recursos naturales, sino que los preserve.
El Estado deberá reenfocar su política exterior a partir de la unión con los países de América Latina y las relaciones comerciales con la región Asia-Pacífico, lo que permitirá superar la dependencia con Estados Unidos.
Se democratizará y proveerá el acceso universal a los medios de comunicación, lo que erradicará la concentración que actualmente existe en este mercado. Un órgano autónomo fomentará la información diversa y aquella hecha por y para las comunidades indígenas.
Se aplicarán "sin miramientos" las sanciones que establece la ley en casos de corrupción, que se combatirá empezando de arriba hacia abajo. A la vez, se hace hincapié en la rendición de cuentas de los servidores públicos a los ciudadanos.
Más empleo, mejores salarios y retorno de migrantes
Deberá haber una política de crecimiento económico sostenido que genere constante empleo, con un incremento gradual de los salarios mínimos y seguridad social garantizada.
El modelo económico tendrá como objetivo principal la redistribución de la riqueza para superar la pobreza y la creciente desigualdad de ingreso entre regiones y personas.
Se propone un servicio único de salud integral que enfatice la prevención y el primer nivel de atención, aunque también deberá estar capacitado para el segundo y el tercer nivel.
Se refinanciará, fortalecerá y democratizará la seguridad social por medio de un incremento moderado y una redistribución del gasto en salud.
El proyecto establece poner en marcha medidas urgentes para crear empleos y recibir a los connacionales deportados por la política migratoria de la administración estadunidense de Donald Trump.
Se promoverá el empleo formal.
Educación
Se describe una reforma educativa que integrará el conocimiento, en vez de segmentarlo, privilegiando aquel que ayude a "la resolución de problemas de la vida real".
La educación se enfocará en el aprendizaje y la experimentación, dará prioridad al conocimiento científico sin menoscabar el acceso a las artes y a la cultura.
Diversidad cultural
El documento Llamado a México dedica varias páginas al reconocimiento y la inclusión de las culturas indígenas a la nación.