Pese al discurso y políticas antiinmigrantes de Trump, las remesas enviadas por los paisanos crecen.
Los ingresos por remesas familiares registraron un repunte anual de 15.1 por ciento al cierre de marzo, revirtiendo la caída de cerca de 1.2 por ciento correspondiente a febrero y con la que registran el mayor incremento para un tercer mes del año desde 2006.
Cifras del Banco de México (Banxico), estimaron que durante el tercer mes del año ingresaron al país 2 mil 520 millones de dólares por envíos de dinero, el mayor flujo mensual desde octubre de 2008.
“La mayoría de los migrantes, con miedo a Trump, adelantaron sus envíos de recursos en diciembre y vimos un repunte muy fuerte por miedo a que fueran a gravar las remesas”, señaló Jorge Gordillo, director de análisis económico de Ci Banco. Añadió que en enero y febrero pasados los migrantes fueron más cautos y para marzo considerando que no hubo algún impuesto a las remesas, se fortaleció la confianza.
En marzo no sólo se reportó un aumento en el número de envíos, sino que también subió el monto promedio de las operaciones, al pasar de 302 dólares a 316 dólares por envío. El número de operaciones aumentó 6.1 por ciento para cerrar en 8 millones de transacciones.
ALIMENTAN AL CONSUMO
Gordillo resaltó que el incremento en el flujo de las remesas es una noticia positiva ya que estas han contribuido de manera importante al consumo interno y han dado un empuje a ese rubro ya que son recursos adicionales, “Nos preocupaba un poco que la disminución de las remesas provocara una disminución en el consumo”.
Al cierre del primer trimestre se contabilizó un ingreso de 6 mil 640 millones de dólares por remesas, siete por ciento más que en los primeros tres meses de 2016.
Alejandro Cervantes, subdirector de análisis económico de Banorte, resaltó que el flujo se incrementó pese a la apreciación de 7.4 por ciento que registró el peso en el transcurso de marzo.
Además, coincidió en que el comportamiento de los envíos estará influenciado por la política anti migratoria del gobierno de EU, muestra de ello son los efectos de la publicación que hizo el Departamento de Seguridad Nacional de aquel país el pasado 20 de febrero, referente a los procedimientos para dar forma a dicha estrategia.
El anuncio, en opinión del analista, motivó un aumento en el flujo de remesas y en el monto promedio de los envíos. Influencia que se prevé se prolongue durante los próximos meses.
“Los trabajadores migrantes mexicanos sin ciudadanía probablemente continuarán descontando una mayor probabilidad de ser deportados, por lo que consideramos que el flujo de remesas del segundo trimestre del año estará explicado por este factor”, abundó.