Uribe García refirió que el SAPAC es “una bomba de tiempo” y si no toman las precauciones debidas seguirán perjudicando el desarrollo económico de Cuernavaca.
De acuerdo con la CFE, hasta el día de ayer habían interrumpido la energía en 35 pozos, por los 87.9 millones de pesos que le debe el SAPAC.
Alejandro Uribe precisó que el rubro donde más está causando “mayores estragos” son los hoteles y restaurantes, pues daña su operación; en el caso del Centro Histórico, han tenido que cerrar temprano, a pesar de que algunos tienen cisternas, las cuales corren el riesgo de vaciarse también.
Las afectaciones en ciertos negocios van hasta un 30 y 50 por ciento, en caso de hoteles las actividades pueden parar hasta en un 70 por ciento, ya que el agua potable es esencial.