CIUDAD DE MÉXICO.Los contaminómetros que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) prueba en el Valle de México carecen de una norma técnica que respalde su operación.La falta de lineamientos, que debe emitir el Centro Nacional de Metrología (Cenam), abre la puerta para que los automovilistas que sean sancionados por contaminar puedan interponer un amparo.
Excélsior reveló el 26 de abril que autoridades pretenden usar estos equipos de rayos infrarrojo y ultravioleta en operativos tipo alcoholímetro para medir gases de escape y cazar a los conductores de vehículos que más contaminen.
De acuerdo con fuentes consultadas, los principales obstáculos que enfrenta el sensor para conseguir la norma es que sólo detecta cuatro gases de seis que miden los verificentros.
Otro problema del sensor, que fabrica la empresa estadunidense Opus Inspection Corporation, es que es único en su tipo, por lo que incurriría en prácticas monopólicas.
La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) emitió el pasado 11 de febrero una opinión contra el contaminómetro, al considerar que “puede impedir o distorsionar el proceso de competencia y libre concurrencia”, porque sólo hay un proveedor del equipo en el país y la Norma Mexicana que se elabora toma elementos técnicos del manual del usuario creado por el propio fabricante.
En una reunión de trabajo, funcionarios de la Semarnat también reconocieron que para regular el equipo prácticamente se transcribió el “manual de usuario” del sensor remoto de la empresa.
Contaminómetros, sin norma técnica
Desde hace más de un año, la Semarnat trabaja en lineamientos para respaldar la operación de sus radares; acusan que reglas buscan favorecer a proveedor.
El sensor móvil que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) quiere implementar en el Valle de México para cazar vehículos contaminantes en vía pública, no tiene certificación del Centro Nacional de Metrología (Cenam), laboratorio de la Secretaría de Economía federal referencia en materia de mediciones del país, donde se calibran instrumentos y patrones.
Desde hace más de un año, un grupo encabezado por Rodolfo Lacy Tamayo, subsecretario de Planeación y Política Ambiental de la Semarnat, realiza pruebas de campo y trabaja en la elaboración de una Norma Mexicana (NMX) que busca avalar la operación del equipo de detección remota y homologar el proceso de evaluación de las emisiones contaminantes de vehículos en circulación.
El objetivo es una regulación que evite que los automovilistas que sean sancionados con fotomultas ambientales de mil 720 pesos puedan ampararse contra la medida.
Las NMX están contempladas en el artículo 3 fracción X de la Ley Federal sobre Metrología y Normalización y expresan una recomendación de parámetros o procedimientos, aunque en caso de ser mencionadas como parte de una Norma Oficial Mexicana como de uso obligatorio, su observancia será entonces imperativa.
Los principales obstáculos que enfrenta el sensor móvil para conseguir una NMX es que carece de trazabilidad, es decir, no existe una prueba en Modo de Aceleración Simulada (ASM, por sus siglas en inglés) con la que se pueda comparar; el equipo sólo mide cuatro de los seis elementos que los técnicos revisan durante la verificación vehicular: hidrocarburos, monóxido de carbono, bióxido de carbono, oxígeno, óxido de nitrógeno y factor lambda, que es la relación de aire-combustible.
Además, el sensor móvil que se pretende utilizar, de la empresa estadunidense Opus Inspection Corporation, es único en su tipo, por lo que se puede incurrir en prácticas monopólicas
A solicitud de la Semarnat, la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) emitió el pasado 11 de febrero una opinión contra el sensor (Expediente OPN-003-2016) al considerar que “puede impedir o distorsionar el proceso de competencia y libre concurrencia” porque sólo hay un proveedor del equipo en el país y la NMX toma elementos técnicos del manual del usuario creado por el propio fabricante.
“Es decir, que en un futuro próximo podría ocurrir que algún interesado pretenda la fabricación de dichos equipos y ello genere problemáticas de derechos de patente, etc., lo que podría constituir una limitante a la libre concurrencia”, manifestó la Cofece.
En una reunión de trabajo del grupo que elabora la NMX, funcionarios de la Semarnat reconocieron que para regular el equipo prácticamente se transcribió el “manual de usuario” del sensor remoto de la empresa Opus Inspection Corporation.
Alejandro Díaz Arzate, vocero de tres mil talleres automotrices en el país, señaló que se han buscado opciones en el mercado, pero hasta ahora no se ha encontrado una tecnología similar, por lo que la Norma Mexicana se está haciendo como un “traje a la medida” al sensor remoto de la firma estadunidense.
“La Norma se está haciendo con base en un equipo cuando debería ser al revés: hacer la Norma y luego buscar la tecnología”, indicó.
Sobre las pruebas para aplicar las fotomultas ambientales que realiza la Semarnat, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, dijo desconocer detalles de esta acción que busca disminuir los altos índices de contaminación.
El lunes, Martín Gutiérrez Lacayo, coordinador de la Comisión Ambiental de la Megalópolis, dijo que con estos contaminómetros hay riesgo de cometer alguna injusticia.
El viernes, Excélsior dio a conocer que a Secretaría de Seguridad Pública será la primera en contar con una Norma Oficial Mexicana para el uso de los radares que detectan que se respeten los límites de velocidad establecidos en el Reglamento de Tránsito capitalino.
Los trabajos para la creación de esta norma comenzaron a realizarse a través del Cenam, con el objetivo de ofrecer certeza técnica en el funcionamiento de los radares que operan en la capital.
Uber topa sus tarifas
En contingencia ambiental Uber no podrá cobrar una tarifa superior a 4.9 veces el valor de cada viaje que atiendan sus socios.
La Secretaría de Movilidad llegó a un acuerdo en el que Uber aceptó cancelar su esquema de cobro basado en una tarifa dinámica y cambiarlo por una que denominó “variable”.
Bajo el nuevo esquema financiero, Uber podrá cobrar hasta 4.9 veces el valor de un trayecto durante la emergencia ambiental que termina el 30 de junio.
La tarifa se modificará cuando se imponga un doble Hoy No Circula, como el que está vigente desde el martes, supuesto en el que los viajes no podrán superar en 2.9 veces su valor.
Uber dará viajes gratuitos cuando ocurran emergencias naturales o de seguridad o salud pública, sólo en zonas de la ciudad que resulten afectadas.
http://www.excelsior.com.mx/comunidad/2016/05/04/1090503