Toda una comunidad de más de cuatro mil personas carece de agua potable, se trata de Jumiltepec, Ocuituco, la cual sólo ve llegar el líquido cada seis meses, obligando a las familias a tener que comprar pipas de agua con valor de 500 pesos cada una, o perforar pozos, lo cual resulta muy costoso.
La comunidad Jumiltepec, que pertenece al municipio de Ocuituco, cuenta con poco más de cuatro mil habitantes, su principal actividad económica es la producción de aguacate, sin embargo carecen de muchos servicios, pues además de la falta de agua, no cuenta con drenaje ni de suficiente alumbrado público.
A decir de los mismos pobladores, este problema tiene más de 25 años, señalando que se deriva de que los manantiales de donde les llegaba el vital líquido -mediante un sistema de escurrimiento- se secaron, aunque también recordaron que hace seis años, las autoridades de ese entonces de la Comisión Estatal del Agua había dicho que se debía al problema con la tubería que está averiada.
Leonel Yáñez Escobar, ayudante municipal de la comunidad de Jumiltepec, reconoció que la autoridad ha sido omisa a este problema, "cada trienio vemos como los candidatos se comprometen a darnos agua si votamos por ellos, ya que ganan dicen que van a ver de qué manera se nos puede ayudar y, finalmente nunca vemos que hagan algo".
Durante el periodo que les llega agua, los habitantes recolectan el líquido en sus cisternas, así como en tambos, tinacos y cualquier otro recipiente de almacenamiento, a fin de poder hacer frente a sus necesidades básicas, como lavar trastes, ropa y bañarse; sin embargo, cuando el líquido se acaba tienen que recurrir a la compra de pipas, cuyo costo oscila entre los 450 y 500 pesos, o en su defecto perforar pozos, "pero sólo lo hacen aquellos que tienen dinero, pues el costo de perforación es alto, además que sólo hay agua en algunas parte de la comunidad".
Los que no tienen dinero tienen que bajar hasta la cabecera municipal de Ocuituco, o buscar en alguna barranca el agua.
El auxiliar municipal, así como demás habitantes que fueron entrevistados, coincidieron en señalar que el vivir sin agua no es vivir, ya que se necesita de este recurso natural para hacer frente a sus necesidades básicas, "necesitamos el apoyo de nuestras autoridades, que perforen pozos, pero bien y no como lo han hecho en anteriores ocasiones que han fracasado".