CUERNAVACA. Con la promesa de una vida mejor para ella y su pequeña hija, María de Los Ángeles H. G. aceptó la propuesta de Orlando S. S. de irse a vivir juntos.
-Te quiero mucho y vamos a salir adelante- le habría prometido, el hombre.
Fue así que la mañana del miércoles 26 de abril de 2017, se cambió a la casa de su pretendiente, ubicada en la calle Paraíso número 15 del poblado de Ahuatepec en Cuernavaca.
Mientras ella se acomodaba en su nueva residencia decidió dejar a su niña con sus padres, pero al cabo de dos días, Orlando le dejó en claro que no aceptaría a la menor.
El mismo día, Orlando se trasladó con ella hasta el bar “Barbas”, ubicado en la carretera Tzicatlán de Axochiapan, ahí la entregó en custodia a Dulce, una empleada del lugar.
Orlando ordenó a María de Los Ángeles que se pusiera a trabajar en el bar o de lo contrario le haría daño a su hija o al padre de la joven.
Con pistola en mano, el hombre le dijo que él era guardaespaldas de un “narco” y que pertenecía a la delincuencia organizada.
A partir de esa fecha, la mujer fue obligada a mantener relaciones sexuales con un promedio de 22 hombres al día, cobrando 120 pesos por un tiempo de 15 minutos.
La víctima logró escapar el pasado martes 6 de junio, y a pesar de su temor inicio una denuncia en contra de Orlando.
En su declaración ante el agente del Ministerio Público, la mujer refirió que la obligaban a trabajar de viernes a domingo, en un horario de 10:30 a 21 horas.
Los lunes y martes de 11 a 20: horas, y miércoles de 11 a 17, tiempo por el cual le exigían un pago de 3 mil pesos diarios.
Así fue la imputación que el Fiscal presentó la mañana del viernes 28 de julio, y que expuso ante una jueza de Control de Garantías del Primer Distrito Judicial, quien resolvió vincular a proceso penal a la persona imputada.
De acuerdo con la resolución, la fiscalía logró demostrar que existían suficientes indicios para someter a juicio a Orlando por el delito de Trata de Personas, en la modalidad de explotación sexual.