Define cuatro objetivos para renegociación. “Buscamos detener el cambio climático e impulsar las inversiones sin costos para la ecología”, La tecnología ha impactado en el empleo, señala la ministra de Asuntos Globales de ese país
Impulsar fuertes estándares laborales y reforzar regulaciones ambientales son dos de los principales objetivos que Canadá busca incluir en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), de acuerdo con Crhystia Freeland, ministra de Asuntos Globales de ese país.
Ayer, la funcionaria presentó ante el Comité Permanente de Comercio Internacional de la Cámara de los Comunes los objetivos que buscará del equipo negociador canadiense en la primera de siete rondas de negociación.
Consideró que ningún país miembro del TLCAN debe reducir la protección del medio ambiente para atraer inversiones y solicitó que los socios del acuerdo comercial apoyen plenamente los esfuerzos para frenar el cambio climático, lo cual debe concretarse mediante el refuerzo de regulaciones ambientales.
Freeland también se pronunció por modernizar el tratado comercial para satisfacer las necesidades de la revolución tecnológica y que a la vez ayude a los trabajadores a tener mejores sueldos y condiciones laborales: “Muchos trabajadores se sienten abandonados por la economía mundial del siglo XXI, y votaron en consecuencia desdeñando la visión liberal moderna de comercio, de crecimiento y apertura al mundo”, alertó.
Opinó que la tecnología ha impactado en el empleo y la región debe adaptarse para sacar ventajas de eso; “hay que evitar convertir al otro en chivo expiatorio”, dijo en una aparente referencia a las críticas del presidente estadounidense Donald Trump al TLCAN y hacia México.
“Aunque la globalización económica ha ejercido presión sobre algunos de nuestros empleos, la automatización y la digitalización han sido factores mucho mayores. La naturaleza del trabajo ha sufrido una revolución en los últimos 20 años, impulsada por un profundo cambio tecnológico”, mencionó.
Además, la funcionaria consideró que el TLCAN debe contar con un nuevo capítulo sobre derechos de género y otro sobre derechos indígenas, a fin de garantizar la igualdad de oportunidades y el respeto a las culturas autóctonas dentro de un nuevo esquema de comercio exterior.
Freeland afirmó que la renegociación del acuerdo debe dar como resultado un comercio trilateral “ejemplar y justo” que, bajo el precepto de “ganar-ganar”, ayude a los trabajadores de los tres países a tener mejores condiciones de vida.
Otros objetivos de Canadá
consisten en reducir o eliminar las prácticas burocráticas red-tape (cuotas administrativas o comisiones) que enfrentan diariamente los exportadores en las fronteras de la región; buscar un mercado más libre para la contratación pública; además de revisar el capítulo 16 sobre la movilidad de profesionales para trabajar en compañías de la región que requieren de este talento para innovarse y ser competitivas.
Freeland añadió que es necesario mantener los elementos del TLCAN que los canadienses consideran fundamentales para su interés nacional, como el capítulo 19 para la solución de controversias cuando existan prácticas desleales en materia de comercio exterior.
De acuerdo con la agenda de la primera ronda de negociación que se llevará a cabo este 16 de agosto en Washington, los temas que se abordarán serán los mecanismos de resolución de controversias y el tema laboral.
Finalmente, la agencia calificadora Fitch Ratings consideró que han disminuido los riesgos de un resultado perturbador para México dentro de la renegociación del TLCAN, pues considera poco probable un acuerdo que perjudique la entrada de México al mercado estadunidense.