El Organismo Cuenca Balsas, de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), confirmó desde el 22 de agosto, a través del oficio BOO.809.02-1754/2017, al Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC), la contaminación con hidrocarburo en cuatro pozos de Cuernavaca, y recomendó indicar a la población suspender el consumo del agua, a pesar de esto el organismo municipal no lo dio a conocer.
Se trata de los Pozos La Noria de Ocotepec, el cual, desde el 15 de agosto, se informó que estaba contaminado con gasolina, debido las fugas que se han provocado por el robo de combustible; en el mismo documento también se confirma la contaminación en el Pozo Ocotepec Dos, Manantial Chapultepec Dos y Calle Hule número 26 del Ejido de Acapatzingo.
El oficio detalla los antecedentes de la petición de estudios al líquido, así como sobre la contaminación en el pozo La Noria, también señala que mediante el oficio BOO.809.08.4/455, con fecha del 21 de agosto de 2017, la Conagua informó a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), con el apoyo del Laboratorio Nacional de Referencia (LNR), el cual llevó a cabo los análisis de metales pesados y compuestos orgánicos volátiles e hidrocarburos totales de petróleo de seis muestras recolectadas el 9 de agosto; todo ello, asegura el documento, fue informado a SAPAC.
Los resultados arrojaron la presencia de hidrocarburos en cuatro pozos, menos en el Pozo Chamilpa Cuatro. En los análisis se detectó ter-butil-metil éter (MTBE), líquido que especifican puede producir efectos nocivos a la salud como dolor de cabeza, náuseas, mareo, irritación de la nariz y la garganta.
En ese sentido, se recomendó al SAPAC “suspender el suministro de agua para consumo humano a la red de distribución”, esto con la finalidad de evitar posibles daños a la salud por la concentración del contaminante.
El organismo Cuenca Balsas indicó al organismo municipal que debía coordinarse con Petróleos Mexicanos (PEMEX) para tomar las medidas necesarias para “integrar las aguas referidas a condiciones adecuadas para el consumo humano debiendo informar la situación en un plazo de 10 días hábiles a partir de la notificación”.
Este informe fue entregado al SAPAC el 22 de agosto y firmado por el mismo director José Pérez Torres; a pesar de esto, las autoridades municipales no han notificado a la población sobre dicho riesgo.