Xyoli Pérez Campos, titular del Servicio Sismológico Nacional (SSN), explicó que el temblor registrado a las 23:49 horas, de magnitud 8.2 en la escala de Richter, se localizó en el mar aproximadamente a 133 kilómetros al suroeste de Pijijiapa, Chiapas, a 58 kilómetros de profundidad.
Hasta las siete de la noche de ayer, el SSN había reportado 459 réplicas, la mayor de 6.1, la cual ocurrió 28 minutos después del sismo principal.
En conferencia de prensa en Ciudad Universitaria, los expertos indicaron que en los estados de Oaxaca y Chiapas se sintió el sismo con mayor intensidad. Es posible que se sigan teniendo réplicas y que pueden llegar a magnitudes de 7; sin embargo, no sabemos ni cuándo ni de qué magnitud podrían ser, por eso la recomendación es estar atentos
, dijo Pérez Campos.
Leonardo Ramírez, de la Unidad de Instrumentación Sísmica del Instituto de Ingeniería de la UNAM, explicó que la idea de que fue intenso, pero no causó grandes estragos en la capital del país, como en 1985, se debe a tres factores asociados: la distancia, la magnitud y las características del sitio donde vivimos.
Recordó que en 2012, la Ciudad de México sintió con mayor intensidad el sismo de 7.4 Richter registrado en Ometepec, Guerrero, pero esto se debe a que dicho sitio está mucho más cerca, mientras el temblor en Chiapas tardó más de 130 segundos en llegar a la capital.
Los especialistas del Instituto de Ingeniería estiman que 50 millones de personas estuvieron expuestas al sismo o lo sintieron, de las cuales 38 millones lo percibieron de manera moderada.
Según Pérez Campos, el gran sismo que se ha comentado por varios años que ocurrirá no fue el del jueves 7 de septiembre. El movimiento que se espera, que sería de magnitud 8, corresponde a la zona de las costas de Guerrero, de una zona conocida como el GAP de Guerrero, una brecha sísmica ubicada en el océano Pacífico mexicano que tiene una extensión de 230 kilómetros.
La especialista recomendó a la población ser prudente, pues circulan en las redes sociales rumores en los que se avisa de un sismo de 8.6 grados, pero se trata de una mentira.
La jefa del SSN explicó que se cuenta con registros a partir de 1910, año en el que se fundó el Sistema Sismológico Nacional; desde entonces los terremotos más fuertes han sido el de 1932, en las costas de Jalisco y Colima, con magnitud de 8.2, y el de 8.1 en 1985. Hacia atrás no tenemos registros instrumentales, pero sí hay evidencias que ocurrió un sismo en las costas de Oaxaca y Guerrero con una magnitud de entre 8.4 y 8.6, en 1787
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