Para hacer frente a la emergencia y parte de la reconstrucción de edificios colapsados en la Ciudad de México por el sismo de magnitud 7.1 del 19-S, el gobierno capitalino cuenta con recursos propios en el Fondo de Atención a los Desastres Naturales (Fonaden) que asciende a 9 mil 400 millones de pesos.

A esa cantidad sumarán recursos federales provenientes del Fondo Nacional de Desastres (Fonden).

El secretario de Finanzas capitalino, Édgar Amador Zamora, explicó que dicho fondo cuenta con 9 mil 400 millones de pesos y hasta el momento se han activado 3 mil millones de pesos para atender la emergencia y las tareas de reconstrucción en la capital del país.

Se ha gastado para pagar cerca de 200 millones de pesos por la gratuidad en el transporte público durante los 10 días que duró la emergencia; 50 millones de pesos, para el apoyo de cheques de renta y los 800 millones de pesos que otorgarán a la bolsa para avalar los créditos de nuevas viviendas con la Sociedad Hipotecaria Federal, entre otros.

Al preguntarle por qué sólo se han activado 3 mil millones de pesos, Édgar Amador respondió que “es mucho dinero” y que se liberó esa cantidad porque se estima que la afectación por el sismo no supera ese monto; segundo, se tiene que contar con recursos económicos suficientes en caso de que los ingresos se reduzcan y no se cumpla con la meta presupuestal para cerrar 2017; tercero, que la Ciudad siga manteniendo esa reserva financiera ante cualquier eventualidad.

De hecho, recordó que el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, aseveró que no dejará en ceros ese fondo para la siguiente administración. “Que se active no significa que se tiene que agotar, hay que hacer un uso racional”, expuso.

El secretario de Finanzas de la Ciudad de México explicó en entrevista con El UNIVERSAL los diversos esquemas económicos y financieros que se han instrumentado, tanto para atender la emergencia así como los que serán para las tareas de reconstrucción.

En este punto precisó que no se ha contemplado contratar más deuda pública para la Ciudad de México bajo ningún escenario. “Esa fue justamente la idea. Formar un fondo de contingencia sólido para que la Ciudad no tuviera que enfrentar la paralización de su presupuesto y contratar deuda” ante una situación como fue el sismo del 19-S.

Sobre si existe un costo estimado para lo que será la reconstrucción de la CDMX, Amador Zamora comentó que todavía es difícil calcular, pero lo que sí señaló es que el grueso de la construcción de viviendas lo cargará la iniciativa privada. “El tema es que el grueso del costo vendrá del lado de la vivienda privada, es algo que no computa en el balance del gobierno, [lo que nos toca] es hacer política pública para ayudar en la restitución del patrimonio de los ciudadanos con esos créditos”, detalló.

Reveló que buscan que el gobierno federal flexibilice las reglas del Fonden para que, por ejemplo, damnificados de Benito Juárez puedan acceder a esos recursos. Sobre créditos hipotecarios que van desde los 100 mil hasta los 2 millones de pesos para que las personas vuelvan a tener su departamento, casa o refuercen las estructuras, rechazó que signifiquen una deuda, porque sólo se paga el interés de 9% anual durante 20 años.