Hubo reclasificación y se hallaron duplicidades en Oaxaca y Chiapas, explica Rosario Robles, titular de la Sedatu. El gobierno ha realizado labores que competen a municipios, como la demolición, critica
Por irregularidades, unas cuatro mil personas fueron retiradas del censo de viviendas dañadas por los sismos del 7 y 19 de septiembre en Oaxaca y Chiapas, informó Rosario Robles, secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
Durante la presentación del Censo de Viviendas y Acciones para la Reconstrucción: Transparencia y Rendición de Cuentas, Robles dijo que el censo de viviendas dañadas se cerró, pero se han establecido mesas receptoras de inconsistencias, que funcionarán mientras está el proceso de reconstrucción.
Estas inconsistencias, abundó, pueden ser que la calificación del daño no fue el adecuado y por lo tanto se procedería a una reclasificación, o que alguien indebidamente ocupe el lugar de otra persona, o que haya duplicidades.
“Hemos bajado como a cuatro mil personas del censo, que definitivamente no tenían derecho a estar ahí. Y lo quisimos cerrar porque cuando empieza a haber intervención de los presidentes municipales, de decir ‘oigan es que faltaron 400’, porque el día de mañana va a haber elección, ya estamos en un proceso electoral y por eso la preocupación de que fuera (el censo) persona por persona, casa por casa, y que no hubiera intermediario alguno.
“Porque es típico que aparece el líder que dice ‘yo aquí tengo a 400 censados’. No discúlpame, tu censo no es válido porque nosotros vamos a contar a la gente que tiene su folio; ese folio lo ha guardado la gente creo que con mayor ahínco que su credencial de elector”, expresó Robles.
Resaltó que el censo, en el que participaron unas siete mil personas, se realizó en cinco días “y era casi casi a ojo de buen cubero”.
Ahora, añadió, “ya estamos yendo con todo el personal técnico, con nuestro listado de 43 peguntas, (la gente) tiene que firmar un contrato de Bansefi, nos firman una responsiva a nosotros (Sedatu), hay archivo fotográfico, entonces evidentemente la circunstancia cambia”.
Ante representantes de las Cámaras del sector de la construcción, de organizaciones sociales y de funcionarios de otras dependencias, Robles dijo que hasta el momento se han entregado once mil 923 tarjetas en Oaxaca para viviendas que tuvieron daño parcial o total; y en Chiapas once mil tarjetas.
Refirió que en Oaxaca hay 60 mil 620 y en Chiapas 58 mil 366 viviendas con daño total.
Para quienes tuvieron pérdida total, obtendrán dos tarjetas que sumarán un total de 120 mil pesos, una tendrá el 20 por ciento y podrá tener el efectivo para, si así lo desea, contratar mano de obra, y la otra con el 80 por ciento exclusivamente para adquirir material de construcción. Para quien haya tenido pérdida parcial, recibirá 15 mil pesos.
Ante la perdida de identificaciones oficiales, indicó que la Secretaría de Gobernación está emitiendo las actas de nacimiento de todas las personas que tuvieron pérdida total, para que posean esa y toda la documentación en expediente, como el folio y las cartas responsivas, para futuras auditorías.
Respecto a la demolición de las viviendas para reconstruirlas, enfatizó que la Sedatu no es responsable de hacerlo, aunque hay gobiernos que se lo han pedido.
“Quiero aclarar algo muy importante: nosotros como Secretaría, y con reglas del Fonden, no estamos obligados a la demolición de las viviendas.
“Aquí en la Ciudad de México ya hasta querían que demoliéramos los edificios. Ya nada más falta que quieran que reconstruyamos, nada más falta que quieran eso; es decir cómo se van a demoler edificios, si hubo desarrolladores que de plano sus edificios debieron asegurarlos, porque no es responsabilidad del Gobierno que queden en esas condiciones”, enfatizó la exjefa del Gobierno capitalino.
El Gobierno federal, agregó la funcionaria, ha tenido que asumir labores que competen al municipio, como la demolición de viviendas.
La responsabilidad del Gobierno federal, dijo Robles, es levantar escombros en vía primaria, pero en Oaxaca y Chiapas “por ser tan pobres hicimos un esfuerzo titánico para ayudar en la demolición”. Aclaró que ninguna casa es demolida si no hay autorización para ello.
Tras señalar que las personas que harán autoconstrucción recibirán un manual de técnicas de construcción y tendrán asistencia técnica.
Respecto a las críticas recibidas por impulsar la autoconstrucción, Robles dijo que se trataba de hacer fraccionamientos, además de que “no hay empresas que lo hagan, porque aquí los márgenes de ganancia son mínimos, y porque tenemos que ir al diseño individual, al tratamiento personal de cada una de las viviendas y de las personas”.
Los presidentes municipales, dijo dijo Robles, deben comprometerse a establecer las reglas mínimas de construcción, sobre todo porque Oaxaca y Chiapas son zonas sísmicas.
“El trabajo de con los presidentes municipales va a ser muy importante, esta educación de los presidentes municipales estas reglas para que, independientemente de quién quede, porque el año que viene hay elección”.
“Restauración de templos debería ser con diezmos”
Rosario Robles no dio tregua a nadie. En la presentación del Censo de viviendas dañadas por los sismos criticó lo que consideró han sido abusos por parte del gobierno capitalino, los presidentes municipales e incluso la Iglesia.
De esta última dijo que la reparación de recintos religiosos dañados, considerados patrimonio cultural y artístico y que serán restauradas en su mayoría con recursos privados, debería provenir de los diezmos.
El patrimonio cultural es de todos los mexicanos, dijo la funcionaria, quien refirió que ha habido mucha solidaridad de gente que ha “adoptado” una iglesia para reconstruirla.
“Ahí también hay que ver la transparencia, porque pues el diezmo ¿a dónde se va si no es a mantener las iglesias, ¿no? Digo, debiera, sobre todo porque son patrimonio ¿verdad?”, ironizó Robles. ((Blanca Estela Botello)
DESCUENTO DE APOYO EN CEMENTO
Mauricio Doehner, presidente de la Cámara Nacional del Cemento, indicó que seis empresas se comprometieron a dar descuentos entre 15 y 20 por ciento en el material de construcción.
Señaló que además convinieron en apoyar con la distribución de los materiales, la cual es sumamente complicada tanto en Chiapas como en Oaxaca, pero se hará llegar el material a pie de casa.
Indicó que para hacer frente a la emergencia las empresas cuentan con 150 mil toneladas de cemento para los próximos cuatro meses y no habrá ninguna alza en el precio.