Por segunda ocasión, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) salvó al alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco, de ser destituido del cargo y, esta vez, también evitó la remoción de todo su cabildo, como lo había ordenado el Tribunal de Justicia Administrativa de la entidad. La orden derivó de la admisión de una controversia constitucional promovida por el municipio de Cuernavaca contra la facultad del Tribunal Administrativo para destituir por desacato al edil de la demarcación e inhabilitarlo por seis años.
En su escrito de demanda, el ayuntamiento afirmó que la facultad del tribunal es contraria a la Constitución y a su autonomía municipal. El Tribunal Administrativo local ordenó mediante un decreto, publicado en julio de 2017, la designación de un magistrado instructor para analizar si Blanco incumplió con la ley.
El magistrado decidió ordenar la destitución del munícipe y todo su cabildo por haber incurrido en desacato. El acuerdo de admisión de la controversia fue dictado por el ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien ordenó que la destitución no sea ejecutada hasta en tanto el Máximo Tribunal dicte su resolución.Esta es la segunda vez que la Corte suspende la destitución de Cuauhtémoc Blanco, a quien desde el año pasado el Congreso de Morelos inició juicio político porque supuestamente presentó documentos falsos para acreditar su residencia en la entidad.
En diciembre de 2016, el ministro Alberto Pérez Dayán admitió a trámite la controversia constitucional que Blanco presentó para echar abajo las intenciones de los legisladores locales y ordenó suspender la destitución d hasta que el Pleno resuelva el asunto.
Las suspensiones concedidas a Cuauhtémoc Blanco no implican que su mandato será prorrogado, sino que aunque el Tribunal o el Congreso local decidan destituir definitivamente al alcalde y a su cabildo, las sentencias no podrán ser ejecutados hasta que existan sentencias en las dos controversias constitucionales promovidas por Blanco.