la fecha para terminar el proceso. Mientras el secretario de Economía dijo que las discusiones deberían concluir antes de julio, su contraparte en EU aseguró que no hay urgencia alguna.
México y Estados Unidos tienen una nueva diferencia en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN): la fecha para terminar el proceso.
Es mucho más importante tener
un buen acuerdo, que tenerlo listo
en una agenda precisa
Mientras que el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, dijo que las discusiones deberían concluir antes de julio próximo, el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, aseguró que no hay urgencia para alcanzar un acuerdo. “Es mucho más importante tener un buen acuerdo, que tenerlo listo en una agenda precisa”, dijo Ross en Davos, Suiza.
La gran oportunidad es entre marzo y
el fin del mes de junio, porque tenemos varias limitaciones
Guajardo reiteró ayer que se podría llegar a un acuerdo a más tardar en julio. “La gran oportunidad es entre marzo y el fin del mes de junio, porque tenemos varias limitaciones”, señaló a Notimex.
DÉFICIT DE EU NO ES POR LOS TLC'S
Durante su participación en la reunión anual del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en ingles), Guajardo aseguró que los tratados comerciales proporcionan mejores reglas para que los países se comprometan por medio del comercio, pero no son los responsables de los déficits comerciales.
“Si los tratados comerciales fueran los responsables de los déficits comerciales, ¿por qué el déficit comercial de Estados Unidos con China es de 350 mil millones de dólares sin tratado comercial?”, cuestionó.
Aseguró que no se puede hacer que un tratado comercial resuelva los temas de desarrollo y equidad en un país, son las políticas domésticas las que tienen que hacerse cargo de estos retos y lograr que se juegue en “un terreno justo”.
El déficit comercial de Estados Unidos con México de más de 65 mil millones de dólares fue uno de los principales argumentos del presidente Donald Trump para iniciar las renegociaciones del tratado.
Chrystia Freeland, ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, coincidió con Guajardo y aseguró que los problemas de las clase media de los países no son causados por el comercio, ni por la revolución tecnológica. La solución, considera, está en las políticas domésticas.
Durante su participación en el WEF, dijo que las reformas domésticas y el trabajo con el que se trata de apoyar a la clase media es muy difícil, cuesta dinero y tiempo.
“Lo que es fácil, si eres un político, hablando a esa insegura clase media, es decir: ‘la culpa es de los foráneos, es culpa de ese terrible país, es la culpa de esos terribles inmigrantes’, entonces realmente toma el liderazgo político, realmente tienes que conocer las inseguridades de la clase media y decir: esto es lo que haremos para resolverlo”, comentó la funcionaria.
ACEPTA 'REFORZAR' REGLAS DE ORIGEN
En materia de los tópicos más ásperos en las discusiones del TLCAN, Guajardo aceptó que es necesario reforzar el tema de reglas de origen para que se adapte al contexto actual, pero dando a las empresas posibilidad de maniobra.
“Es correcto que el presidente (Trump) diga que en Norteamérica tenemos que hacer un mejor esfuerzo para integrar valor en la producción en los países norteamericanos, claro que el tema de reglas de origen tiene que ser reforzado, al nivel de que sea posible, para que las compañías se adapten y con el marco de tiempo que les ayude a acomodar los nuevos requerimientos”, mencionó el funcionario.
Otro de los tópicos que el secretario de Economía visualiza complejo en las negociaciones es el de solución de controversias, en el que, aseguró, tendrán que encontrar una manera de acomodar las expectativas de las tres partes y entender las posiciones de cada una de ellas.
Con información de Daniel Blanco