Apenas inicia su movilización para exigir una mesa de diálogo y derogar la reforma educativa
Al final fueron un poco más de 2 mil maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Pocos para un paro nacional, pero suficientes para desquiciar a la Ciudad de México. Armados con colchas, cartones, lonas y casas de campaña, tomaron las calles de Bucareli y Morelos, frente a la Secretaría de Goberanción y declararon a las 15:52 que iniciarían un plantón indefinido hasta que sea reabierta la mesa de negociación sobre la reforma educativa.
Llegarán más, aseguró el líder de la sección 22 de Oaxaca, Eloy López Hernández, quien refirió que de 15 mil miembros de la CNTE serán movilizados.
Argumentó que se han agotado todas las vías de diálogo con el gobierno, por lo que los manifestantes iniciaron medidas de presión como el bloqueo en aeropuertos (Oaxaca), huelgas laborales (Chiapas), así como marchas y plantones en diversas ebtidades. Representantes de la Coordinadora provenientes de Chiapas, Guerrero, Oaxaca y Michoacán, fueron los enviados a la capital con disposición a quedarse en plantón el tiempo que sea necesario.
La Secretaría de Educación Pública, por su parte, aseguró que 98 por ciento de las clases en el país se realizan con normalidad. No obstante, la afectación más seria está en Chiapas y Oaxaca.
La SEP aseguró por ello que el paro no es nacional y señaló que solamente grupos de cuatro estados se encuentran manifestándose. Sentenció que habrá sanciones para los maestros que suspendan clases, lo que se verá reflejados en la próxima nómina.
La SEP además reitera que aquellos maestros que se ausenten injustificadamente más de tres días en un periodo de 30 días, serán separados de su cargo atendiendo a la Ley General de Servicio Profesional Docente.
El pliego petitorio del movimiento exige para el magisterio que sea abrogada la Reforma Educativa, la cancelación del examen de evalución, la reinstalación de los profesores cesados, la contratación automática de los egresados de las normales, la liberación de presos políticos, así como resoluciones justas en los casos Nochixtlán, Ayotzinapa y Arantepacua.
Eloy López expuso peticiones concretas para su sección: “En el caso particular de la sección 22 de Oaxaca, exigimos la devolución de las cuentas bancarias, ya que han pasado cuatro meses que no tenemos la devolución de nuestras cuotas sindicales que aportamos puntualmente cada quincena”.
Como se recordará, el gobierno de Gabino Cue en Oaxaca cortó las vías de suministro oficiales de la Sección 22, que incluía manejo de plazas y presupuesto dentro del Instituto de esducación Pública de Oaxaca (IEPO). Los contingentes de camiones que llegaron a la Ciudad se ubicaron en Paso de la Reforma con Constituyentes, la caseta de cobro de la carretera México-Cuernavaca, y la Calzada Ignacio Zaragoza.
Otros puntos de encuentro se ubicaron en las estaciones del metro Indios Verdes, Balbuena y Chabacano.
Un gran operativo congregó en distintas vialidades de la Ciudad a elementos de la Policía de Tránsito, así como Policías Auxiliares de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), quienes desviaron a los manifestantes de acercarse al Zócalo capitalino, y evitaron que llegaran hasta la Secretaría de Gobernación.
Después de reunirse los contingentes en la “Esquina de la Información” (Bucareli con Reforma), y sostener un mitin junto al muro de contención, maestros y administrativos de las cuatro entidades, se dispusieron a instalar sus campamentos rodeados de vendedores ambulantes que aprovecharon la ocasión para ofrecer sus productos.
Eloy López refiere que tanto a la llegada de los contingentes a Puebla, como en las inmediaciones de la caseta de cobro de la carretera México-Cuernavaca fueron interceptados por elementos policiales quienes pretendían evitar que llegaran a la Ciudad de México. Refirió: “A la caravana de Oaxaca la encapsularon en Puebla, no nos permitían el paso para llegar al Mercado Hidalgo donde nos están recibiendo”.
Sobre los operativos en la Ciudad de México el líder de la sección 22 aseguro que a la altura de Santa Martha Acatitla grupos policiacos detuvieron sus autobuses exponiendo que tenían órdenes expresas de no permitir el paso a la coordinadora, “hicimos lo propio cerrando las vías generando presión mediante el diálogo”.
Después de confrontarse se les permitió la entrada a la Ciudad, hasta los puntos de encuentro de donde descendieron y en un andar lento llegaron a las inmediaciones de la SEGOB, donde se han instalado a la espera de ser atendidos.