De nueva cuenta, autoridades electorales, procuradores y fiscales del país, candidatos presidenciales y ex consejeros cerraron filas contra la violencia y lanzaron un Basta Ya por la ola de crímenes contra candidatos registrada en el país.
Por separado, demandaron a las autoridades competentes poner fin a la impunidad tras las muertes de al menos 47 candidatos, ocurridas tan sólo en el actual proceso de campaña, así como generar un ambiente de seguridad de aquí a la jornada electoral.
El consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, aseguró que el aumento de la violencia no se dio a partir del proceso electoral, sino que ya existía y no implica que los comicios estén “en riesgo de descarrilarse”.
“La violencia no se detonó por el proceso electoral, ya estaba ahí y ese es uno de los grandes problemas nacionales que tendremos como sociedad que resolver [...], pero eso no ha implicado que las elecciones estén en riesgo de descarrilarse por la violencia, las elecciones van adelante”, dijo en entrevista.
Hizo un llamado a las autoridades encargadas de la procuración de justicia para que establezcan condiciones propicias para que la jornada electoral se realice sin contratiempos.
“Es importante que las instancias de seguridad del Estado mexicano, con las que el INE ha mantenido colaboración cercana, estrecha y fluida, realicen todas las acciones de paz pública que sean indispensables para que la jornada del 1 de julio sea, como lo va a ser, un éxito”, añadió.
La magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Janine Otálora Malassis, quien el pasado 21 de junio alertó de la gravedad de que el crimen esté imponiendo a los candidatos, reiteró su pronunciamiento en contra de toda forma de violencia.
“Reitero mi llamado a las autoridades competentes para que se investiguen y sancionen los actos de violencia, así como a que se garanticen la seguridad y una jornada electoral libre de violencia”, escribió en su cuenta de Twitter.
Por otro lado, el ex consejero presidente del entonces Instituto Federal Electoral (IFE), Luis Carlos Ugalde, afirmó que la violencia en las elecciones es una mala señal para la salud democrática de México.
En entrevista, el ahora consultor indicó que esta violencia ha llegado a su nivel más alto; es simplemente reflejo de un problema que lleva gestándose en México durante 20 o 30 años, dada la penetración del crimen organizado en la vida pública, en la vida democrática del país.
“No estoy diciendo tampoco que el proceso democrático en México está controlado por el crimen organizado, por supuesto que no, pero sí estoy diciendo que en algunas zonas de Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tamaulipas, Michoacán, Chihuahua, donde generalmente son localidades rurales, el crimen organizado manda y esto se está viendo con mucha nitidez”.
Consideró una fantasía o una irresponsabilidad pensar que la autoridad electoral pueda hacer algo: “¿Qué puede hacer? Lo que el INE tiene que hacer es administrar las casillas y punto”.
Por separado, el también ex consejero electoral Mauricio Merino aseguró que la violencia política podría inhibir la participación ciudadana el próximo 1 de julio, por ello, destacó que el mejor antídoto contra quienes quieren imponerse a la soberanía popular es salir masivamente a votar.
“Es evidente que cuando hay criterios de inseguridad que pretenden modificar, las condiciones más favorables para salir a votar, la intención es inhibir (el sufragio), pero si la gente sale masivamente a votar contra eso no puede nadie, ni los más violentos”.
Sin dejar de reconocer la situación de violencia que han enfrentado candidatos a cargos de elección popular, el también ex consejero electoral aseguró que la mejor salvaguarda que tiene la democracia es la voluntad del pueblo.
Los candidatos presidenciables también se expresaron sobre el tema. En Tamaulipas, Andrés Manuel López Obrador, de la coalición Juntos Haremos Historia, pidió a la ciudadanía que a pesar de estos lamentables hechos, hay que salir a votar, y señaló que esto sucede por el “régimen corrupto” del PRI y PAN.
A su vez, el candidato presidencial de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya, hizo un llamado a todos los candidatos a “resistir con firmeza y bajo ninguna circunstancia doblarnos” ante las amenazas del crimen organizado.
El candidato independiente Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, coincidió en que la violencia política podría poner en riesgo el proceso electoral en algunas zonas.