Los morosos de la paraestatal adeudan 43 mil 320 millones de pesos, según datos del INAI, y el mayor adeudo es el correspondiente a la zona Sureste, con el 34 por ciento.
Andrés Manuel López Obrador anunció que se condonarán las deudas de “morosos en resistencia civil” de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), los cuales adeudan 43 mil 320 millones de pesos, según datos del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
Subrayó que los ciudadanos que estén en “resistencia civil” contra la Comisión Federal de Electricidad por “cobros excesivos” en sus recibos de luz, “no pagarán ni un solo peso”.
“Habrá borrón y cuenta nueva”, subrayó López Obrador en Palenque, Chiapas.
La llamada “resistencia civil” inició en 1995 en estados como Tabasco, Chiapas, Veracruz, Estado de México y la Ciudad de México.
El morenista recordó que ese fue uno de los compromisos que hizo en su campaña, pero enfatizó que “para el consumidor, el ‘borrón y cuenta nueva’ es a partir del día 1 de julio, para que no vayan a decir que ahora no pago porque en enero se condona. No, ‘el borrón’ es del 1 de julio para atrás”, sostuvo.
De acuerdo con el INAI, el mayor adeudo es el correspondiente a la zona Sureste, con el 34 por ciento, unos 14 mil 553 millones de pesos, en Tabasco, Chiapas y Veracruz.
En otro tema, López Obrador salió en defensa del nombramiento de Manuel Bartlett como próximo director general de la Comisión Federal de Electricidad.
“El licenciado Bartlett, desde hace muchos años, ha estado defendiendo la industria eléctrica nacional, por eso decidí proponerlo para ser el director de la Comisión Federal de Electricidad”, apuntó.
También recordó que “la defensa de Bartlett del sector eléctrico ha sido por más de 15 años”.
El virtual presidente electo aseguró que la experiencia de Bartlett en las secretarías de Educación y Gobernación “fueron factor para que se decidiera dicho nombramiento”.
Más tarde, en el aeropuerto de Villahermosa, antes de volar a la Ciudad de México, López Obrador señaló que tras los últimos nombramientos que ha realizado para integrar su gabinete ampliado, específicamente el caso de Manuel Bartlett Díaz como director general de la CFE, “es natural que existan críticas”.
“Ahora el gobierno cuidará que el patrimonio de los mexicanos beneficie a una minoría”, sostuvo.
El virtual presidente electo dijo entender esos cuestionamientos, pero recalcó que “el pueblo votó para que haya un cambio verdadero y yo no voy a ser tapadera de nadie, no voy a ser alcahuete, yo voy a cumplirle a los mexicanos”.
Recalcó que es natural que existan esas críticas, porque “durante muchos años se llevó a cabo una política donde no contaba el pueblo; eran nada más los políticos y los llamados hombres de negocios los que dominaban México”.
“Ahora el gobierno va a representar a todos, a ricos y a pobres, y va a haber un gobierno que va a representar a los ciudadanos mexicanos y que va a cuidar que el patrimonio de los mexicanos, el patrimonio nacional, no beneficie a una minoría, sino que sea en beneficio de todos los mexicanos”, apuntó.
Respecto al proceso de descentralización de la mayoría de las dependencias, López Obrador dijo que “es un proceso que va a iniciar desde los primeros días del próximo gobierno”, y puntualizó que se va a procurar que al término del sexenio “ya todas las dependencias estén operando en los estados”.