Cuernavaca, Mor., El equipo del gobernador electo, Cuauhtémoc Blanco Bravo, anunció que ya no acudirá a las reuniones de entrega y recepción con los colaboradores del mandatario saliente, Graco Ramírez, debido a que éste se niega a entregar información de su gobierno. Por ello, esperará hasta el primero de octubre, cuando el ex futbolista asuma el cargo, para conocer en qué condiciones dejó el perredista la administración estatal.
En rueda de prensa, José Manuel Sanz Rivera, coordinador de la comisión de enlace de Blanco Bravo, señaló que en las mesas de trabajo el gobernador Graco Ramírez y su equipo ‘‘sólo han expuesto lo que consideran logros de cada dependencia, sin entregar información que permita a la administración entrante conocer los focos rojos que nos lleven a la toma de decisiones en cada dependencia’’, dijo Sanz.
‘‘Si no quieren entregar, que no lo hagan. El primero de octubre llegarán las empresas de auditoría y un equipo especializado. Veremos en qué condiciones dejaron la administración y lo daremos a conocer a los morelenses’’, mencionó Sanz.
El coordinador y otros integrantes de la comisión de enlace de Blanco Bravo denunciaron que, al final de su mandato, Graco Ramírez impulsó en el Congreso local reformas que ‘‘impiden o complican cualquier investigación o auditoría en las distintas dependencias’’.
Cipriano Sotelo Salgado, encargado del área jurídica, dijo que darán a conocer esta situación ante la Secretaría de la Función Pública para que se finquen responsabilidades administrativas.