El fiscal anticorrupción no pudo probar que el exsecretario de Administración y Finanzas desviara recursos públicos.

Un tribunal de juicio oral resolvió absolver a Alfredo Jaime de la Torre, exsecretario de Administración y Finanzas en el gobierno del panista Marco Adame, de los delitos de peculado y ejercicio indebido del servicio público, al comprobarse que nunca desvió recursos dirigidos al Instituto de Crédito para los Trabajadores al Servicio del Estado (ICTSEM).

Víctor Javier Hernández Vega, quien encabezó la defensa del exfuncionario panista, detalló que la exoneración de los cargos se realizó con base en las pruebas aportadas por la propia fiscalía y ni siquiera fue necesario presentar elementos adicionales.

Acusó que el proceso penal estuvo viciado de origen, porque en la denuncia iniciada por el entonces procurador fiscal y actual fiscal anticorrupción, Juan Salazar Núñez, no se aportaron pruebas del supuesto desvío de 173 millones de pesos correspondientes a las cuotas aportadas por los burócratas al ICTSEM.

“Fuimos claros y precisos al demostrar que el señor Alfredo en ningún momento desvió ningún recurso, en ningún momento dejó de pagar al instituto, que al contrario, en su momento, el  procurador fiscal, hoy fiscal anticorrupción, presentó una denuncia sin sustento en la cual no se demostró que efectivamente él haya tomado algún dinero del instituto, (incluso) ocultaron mucha evidencia", dijo, y señaló que, por el contrario, se demostró que los recursos sí fueron depositados al instituto.

Precisó que durante la audiencia de desahogo del juicio oral, la fiscalía presentó a ocho testigos cuyas declaraciones fueron suficientes para demostrar la inocencia del exsecretario, y resaltó que este es un nuevo golpe para el actual fiscal anticorrupción, Juan Salazar Núñez, quien evadió comparecer ante el tribunal oral pese a que fue emplazado.