Durante su última intervención como Jefe de Estado en el debate general de la 73 Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el presidente Peña Nieto llamó a atender “urgentemente” el tráfico de armas ilícitas, que constituye un flagelo.
"Lo digo con toda claridad, el tráfico de armas ilícitas constituye un flagelo que debemos atender urgentemente", pidió Peña Nieto.
Aseguró que el diálogo, la cooperación y un sistema basado en reglas son la mejor opción para lograr soluciones justas compartidas y perdurables a los retos globales.
Dijo que construir un mundo de paz, amistad y de cooperación internacional "nunca ha sido tarea fácil, hay quienes optan por la exclusión y la discordia, también están los que eligen ser meros observadores en lugar de ser verdaderos agentes de cambio”.
Señaló que esas alternativas son contrarias al espíritu de armonía y fraternidad universal que inspira a los miembros de esta Asamblea, esta organización es la mejor muestra de que bien vale la pena lugar por un mundo más pacífico y seguro, más incluyente e igualitario, más desarrollado y sostenible.
Indicó que los retos que enfrenta la comunidad internacional obligan a permanecer fieles a los ideales que animaron el establecimiento de las Naciones Unidas y a seguir construyendo sobre los principios establecidos en su carta fundadora "cumplamos todos con responsabilidad los compromisos que los estados han asumido individualmente en beneficio de cada nación".