Cancún.— El gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, confirmó la renuncia del secretario de Seguridad Pública del estado, Rodolfo del Ángel Campos, y el nombramiento, en su lugar, del ex comisionado de Seguridad Pública de Morelos, Alberto Capella Ibarra, quien dejó la corporación el 14 de septiembre pasado.
Ayer, en conferencia de prensa, el Ejecutivo estatal dio a conocer que Rodolfo del Ángel solicitó su renuncia al cargo, el cual será ocupado por Capella Ibarra, quien tuvo un puesto similar en el municipio de Tijuana, en 2010 y luego en el estado de Morelos, en 2014, al mando de Graco Ramírez.
Carlos Joaquín recordó que después de recibir de la administración borgista “una policía desmantelada y desmoralizada”, Del Ángel Campos deja una corporación “en crecimiento y confiable”, con elementos mejor pagados, seguros de vida dignos y mayor equipamiento, con 500 patrullas nuevas, a diferencia de las 20 que encontraron hace dos años al iniciar este gobierno.
Asimismo, el mandatario comentó que se construyeron nuevas bases de la Policía Estatal en Cancún, Cozumel, Playa del Carmen, Chetumal y Tulum. Igualmente, que se inició el proyecto de videovigilancia con una inversión de 2 mil 900 millones de pesos.
Previo a nombrarlo oficialmente como nuevo secretario de Seguridad Pública, el gobernador presentó a Jesús Alberto Capella; señaló que es un abogado nacido en Tijuana, que enfocó sus esfuerzos en exigir seguridad y mayor transparencia, como ciudadano.
En sus inicios, Capella Ibarra —conocido como El Rambo Tijuanense—, fungió como fiscal ciudadano en el Consejo de Transparencia y Combate a la Corrupción y fue consejero en Comité de Participación Ciudadana de la Procuraduría General de la República (PGR).
Como comisionado de Seguridad Pública en el estado de Morelos, su cargo más reciente, Capella Ibarra trabajó bajo la estrategia del Mando Único; de acuerdo con el Semáforo Delictivo Nacional, durante el tiempo que estuvo al frente, la entidad del centro del país logró color verde en secuestro, extorsión, robo a negocios, lesiones, violaciones y feminicidios.