A partir de este lunes, los capitalinos tendrán nuevos gobiernos en la 16 demarcaciones, denominados alcaldías, conformadas por los alcaldes y en cada una también habrá un concejo con 10 integrantes de diversos partidos políticos, que pretenderán ser un contrapeso a los gobernantes al supervisar su labor, aprobar el proyecto de presupuesto y sobre todo, garantizar mayor cercanía con la población, dar seguimiento a sus demandas y exigir que los funcionarios rindan cuentas.

Los alcaldes rendirán protesta esta mañana ante el Congreso de la Ciudad de México para asumir sus cargos y después irán a sus demarcaciones a tomar protesta de los concejales; en el caso de Coyoacán la toma de los cargos dependerá de la resolución en tribunales sobre la nulidad de los comicios, lo cual estaba por resolverse la noche del domingo.

Para garantizar la operación de las alcaldías en el resto del año, el Presupuesto de Egresos de la Ciudad de México contempla 310 millones de pesos, de los cuales cada territorio recibirá 19 millones 375 mil pesos que se usarán en pagar los salarios de los 160 concejales de la Ciudad —que ganarán 21 mil pesos mensuales—, acondicionamiento de oficinas, materiales, personal de apoyo, entre otros rubros.

“Lo que tenemos que demostrar a la ciudadanía es que no se engrosó la burocracia, lo que se hizo fue hacer un sistema colegiado para que no sólo existiera una figura y una expresión partidista gobernando, sino que haya un equilibrio con diferentes expresiones para satisfacer mejor las necesidades de los ciudadanos”, dijo Raúl Paredes, concejal del PAN en la alcaldía de Miguel Hidalgo que gobernará Morena.

¿Qué va a cambiar?

Aunque en otras entidades ya existen, las alcaldías son algo nuevo para la capital y nacen de la Constitución Política de la Ciudad de México, donde se plasmó esta nueva figura.

Las alcaldías tendrán un concejo, presidido por el alcalde y habrá 10 concejales, seis del mismo partido del gobernante, que fueron electos el 1 de julio, y cuatro más de diversos partidos, según su nivel de votación.

Concejales entrevistados aseguran que una de las transformaciones que prometen las alcaldías es estar más cercanos a los vecinos y fungir como primer contacto con el gobierno.

“Antes teníamos un jefe delegacional y funcionarios que no los volvías a ver, sólo en campaña, ahora se acorta esa brecha. Seremos un puente de comunicación entre los vecinos y la alcaldía, los concejos están integrados para poder tener diagnósticos de primera mano para trabajarlos con los ciudadanos y la alcaldía”, aseguró Erick Vargas, concejal de Morena en Magdalena Contreras.

Para esta labor, los concejales podrán convocar a audiencias públicas en sus circunscripciones y hacer recorridos, recibir las demandas ciudadanas y canalizarlos a las instancias de gobierno, pues no podrán ejercer funciones ahí, pero sí podrán dar seguimiento, pues su tarea será supervisar y evaluar las acciones de los alcaldes.

Por ejemplo, si los vecinos plantean problemas como arreglar una luminaria, la poda de un árbol, algún servicio urbano, o si bien denuncian una obra irregular, los concejales escucharán y asesorarán para que el vecino presente su queja ante el área correspondiente.

La novedad es que los concejales podrán dar seguimiento del cumplimiento, o en el caso de la obra irregular, solicitar al área de la alcaldía respectiva el expediente del caso para su revisión, describió Raúl Paredes, integrante del concejo en Miguel Hidalgo.

“Las alcaldías no son un mero cambio de nombre, es dejar atrás el poder unipersonal de un delegado que decidía todo”, añadió Antonio Alemán, concejal del PRD en Iztacalco, demarcación que gobernará Morena.

Entre sus principales atribuciones, el proyecto de presupuesto de la alcaldía pasará por la aprobación de los concejales, facultad inmersa en la polémica, pues Morena en el Congreso local propuso cambios a esta disposición.

Los concejales también aprobarán los proyectos de programas parciales de desarrollo urbano, lo cual será clave en demarcaciones donde existe un “boom inmobiliario”.

Podrán aprobar bandos de gobierno, emitir opinión respecto a cambios de uso de suelo y construcciones, opinar sobre concesión de servicios públicos, podrán citar al titular de la alcaldía o a directivos a rendir informes ante el pleno, entre otras labores.

Tendrán su reglamento interior y deberán sesionar de forma ordinaria una vez al mes, por lo menos. Conformarán comisiones para los temas más importantes de la demarcación.

Los entrevistados describen al concejo como una especie de “mini congreso”, por su similitud con un poder legislativo en su forma de operar.

La coalición Morena, PT y PES gobernará en 11 alcaldías y en estas tendrá mayoría de concejales, sin embargo, Erick Vargas, concejal de Morena, sostuvo que no van a mayoritear a los concejales de oposición: “Tiene que haber consensos. Se van a encontrar los puntos en común y vamos a generar diálogo”.

Antonio Alemán, concejal del partido del sol azteca, dijo que como oposición denunciarán lo que está mal y recordó que la gente demostró con su voto en la pasada elección “que ya no quiere una política pública sectaria”.

El salario de los concejales no será mayor de 265 unidades de medida y actualización, el equivalente a poco más de 21 mil pesos. Pero los entrevistados consideran que este salario no debería estar tasado y que debería ser mayor.

Además de la creación de los concejos, el modelo de las alcaldías dará mayores atribuciones a los alcaldes, por ejemplo, ahora podrán presentar iniciativas ante el Congreso de la Ciudad de México, ejercerán con autonomía presupuestal, programática y administrativa los recursos que se les asignen, podrán realizar actividades de verificación en materia de uso de suelo entre otros temas.

Reelección

A su vez, los alcaldes y concejales que asumen hoy sus cargos tendrán la posibilidad de repetir en sus cargos.

“Las alcaldesas, los alcaldes y concejales podrán ser electos consecutivamente para el mismo cargo, hasta por un periodo adicional. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que les hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato”, señala la Constitución Política de la Ciudad de México.

Estos servidores públicos no podrán ser electos para el periodo inmediato posterior en una alcaldía distinta a aquella en la que desempeñaron el cargo.

De cara al inicio de esta nueva forma de gobierno en las alcaldías, Raúl Paredes, concejal en Miguel Hidalgo, señaló que los concejos deben hacer una muy buena labor “para que los ciudadanos digan con claridad que sí sirven y son parte de su voz, de lo contrario, sin duda este cargo va a ser cuestionado en los próximo tres años”.