Maynor Suazo, de sólo 16 años de edad y procedente de Tegucigalpa, se unió desde hace diez días a la caravana; Alejandro Suarez de Tegucigalpa, dijo que el objetivo es llegar hasta Estados Unidos, pero en caso de no hacerlo, se quedará en algún estado del país
Luego de que el Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, asegurara que brindará visa de trabajo a los migrantes centroamericanos que busquen llegar al país, decenas de personas provenientes de Honduras, El Salvador, Nicaragua y Guatemala, esperarán que al tomar posesión cumpla su promesa de regularizar su condición; mientras tanto seguirán avanzando en la caravana hacia la frontera norte de México.
Maynor Suazo, de sólo 16 años de edad y procedente de Tegucigalpa, se unió desde hace diez días a la caravana y, aunque han sido días difíciles, espera terminar el viaje o al menos quedarse en México ya regularizado.
“Busco pasar a Estados Unidos, mi familia está en Honduras, pero yo ya les dije que no regreso. En Honduras no hay trabajo ni comida; yo prefiero venir a migrar que morirme de hambre”, explicó a La Razón.
Dijo que López Obrador les prometió trabajo, por ello esperará a que cumpla, y si no, se quedará a trabajar en México, pero aseguró que a Honduras ya no volverá debido a la ola de violencia que existe.
“Estamos esperando que nos eche la mano, pero en lo que pasa tenemos que avanzar porque no podemos quedarnos en Chiapas, aquí ya hay muchos compatriotas. Nosotros sólo sabemos que nos va a echar la mano, pero desconocemos cuando”, agregó.
Por su parte, Alejandro Suarez de Tegucigalpa, dijo que el objetivo es llegar hasta Estados Unidos, pero en caso de no hacerlo, se quedará en algún estado del país: “vengo con mi hijo, me vine porque allá la mafia extorsiona en cualquier empleo que tengas. Yo vendí mi taxi y me vine con mi hijo a la aventura, pues ya no regreso. Espero que su nuevo Presidente nos ayude porque nos queremos regularizar y él lo prometió”.
Los migrantes buscan recorrer la mayor cantidad de kilómetros mientras el Presidente electo cumple la promesa de concederles visa de trabajo; asimismo, piensan que en el centro del país los trámites pueden ser más fáciles que en los estados del sur.