En entrevista, el activista ambiental manifestó que el Ejecutivo estatal "ha sido bastante omiso y ha malgastado los recursos en exceso"; por ello, se pronunció por hacer una evaluación a fondo sobre cómo se han realizado las obras para evitar la contaminación y la aplicación de los recursos.
Recordó que disminuir la contaminación es posible con obras y acciones; "nosotros en Cuentepec gestionamos recursos federales para drenaje y agua potable y una planta tratadora; las aguas tratadas son utilizadas en la agricultura y no se vierte nada a las barrancas y al cauce (...), pero si no hay voluntad política de gobierno, esto no se puede hacer".
El activista ambiental señaló que los recursos del gobierno para abatir la contaminación no han sido suficientes, sumado a la negligencia, desconocimiento de la situación geográfica de los municipios por donde cruza el río y a la falta de interés de los ayuntamientos, "lo que agrava la contaminación del cauce; lejos que quitarla, la incrementa al no realizar acciones de su rescate".
Ejemplificó que en la planta de tratamiento de Acapantzingo en Cuernavaca, con capacidad para tratar 750 litros por segundo, se tratan solo 300; "su costo es de 750 litros, es un gasto elevado para la operación de la planta que no tiene agua suficiente", además de que municipios como Cuernavaca, Temixco y Emiliano Zapata arrojan sus aguas crudas al cauce, lo que genera una contaminación alarmante.
Orihuela García enumeró estos municipios, destacando que lo más grave ocurre en Emiliano Zapata, donde la "descarga un drenaje que iba para una planta de tratamiento que nunca se hizo en Tezoyuca, toda el agua negra del municipio la vierten a un canal a cielo abierto, es lo más fuerte que hay", otra más, dijo, es en Cuernavaca, a la altura del centro comercial "Adolfo López Mateos"; "todos los residuos van a parar a la barranca de Amanalco, y ésta, a su vez, a la de Guacamayas, para ir al Apatlaco", y el último fuerte foco de contaminación se da en Temixco, donde "hicieron una planta tratadora pegada al río; en esa planta se hace todo el trabajo de limpieza y arroja el lodo y contaminación al río; ello provoca una grave crisis de contaminación en los 10 municipios por donde cruza el afluente".
Insistió que la negligencia de las autoridades y la falta de experiencia de los gobiernos municipales y del estado "genera más contaminación"; además, el argumento de las autoridades es que no hay dinero en el estado; sin embargo, la Comisión Nacional del Agua pone la mayor parte de los recursos, pero al no poner nada el Estado, los dineros se regresan a la federación.
Por otro lado, lamentó el desconocimiento de las autoridades de Cuernavaca, (ya que) "tan solo en la barranca del Pilancón hay más de cinco ojos de agua que vierte 100 litros de agua a la superficie, misma que es era desperdiciada (...); en la perforación de un pozo para extraer 25 litros se gastan cinco millones de pesos; aquí el agua está en la superficie que es desperdiciada y se puede canalizar a las colonias para suministrar el vital líquido".
Orihuela García recalcó que tan sólo en la capital del estado existen más de 60 manantiales de agua limpia que son contaminados y abandonados "de manera criminal".