En 2017, nueve de cada 10 adultos residentes de áreas urbanas consideraron que la corrupción es una práctica frecuente entre los empleados del Gobierno estatal
Morelos se ubica en el tercer lugar de las entidades con mayor proporción de unidades económicas víctimas de corrupción de acuerdo a la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) del Instituto Nacional Estadística y Geografía (INEGI).
En el marco del día internacional contra la corrupción, 9 de diciembre, el INEGI ofreció información sobre las experiencias de corrupción que han padecido personas y unidades económicas al intentar hacer algún trámite gubernamental.
En 2017, nueve de cada 10 adultos residentes de áreas urbanas consideraron que la corrupción es una práctica frecuente entre los empleados del Gobierno estatal, quienes buscan obtener beneficios personales como dinero, regalos o favores por la provisión de algún bien o servicio.
De acuerdo al INEGI en los últimos años se incrementaron los porcentajes de personas víctimas de al menos un acto de corrupción al pasar de 12.1 por ciento en 2013 a 14.6 por ciento en 2017, esto significó que la tasa de incidencia de corrupción, 25 mil 541 delitos por cada 100 mil habitantes, fuera incluso más alta que la tasa de incidencia delictiva de robo en calle o transporte público.
Respecto a las unidades económicas, 247 mil 267 establecimientos fueron víctimas de corrupción en 2017. Morelos ocupa el tercer lugar con mayor proporción de establecimientos víctimas de corrupción, con ocho por cada 100 establecimientos, y sólo por debajo de la Ciudad de México y Estado de México, en donde los ámbitos donde se presentaron actos de corrupción con mayor frecuencia fueron en la interacción con autoridades de seguridad pública y en los trámites relacionados con el acceso a la justicia.
A pesar de todo lo expuesto, la corrupción es un acto que en México no se denuncia y que le ha costado a los mex