-Lamentó Villalobos actos cometidos contra la Secretaría de Seguridad Ciudadana
Luego que la Policía Morelos irrumpiera el edificio administrativo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana para imponer sus condiciones de trabajo, fue el alcalde de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán, quien lamentó que la buena relación que había iniciado con el Gobierno del Estado, “recibieran una patada en el trasero”. En tono molesto, el edil capitalino criticó severamente el hecho de que la Policía Morelos insista en imponer el mando policiaco en Cuernavaca, y que las tareas de seguridad y prevención del delito, se vean distraídas para que policías estatales vigilen a policías municipales, como ocurrió ayer.
Dijo en entrevista que por decreto, quien lleva el mando es el Gobierno del Estado, pero los titulares de las áreas o en este caso en los municipios, es responsabilidad del edil, que el Ejecutivo no puede designar a un responsable de seguridad en la capital morelense para que realice además labores administrativas.
“Nosotros debemos designar al responsable el que deberá ponerse a disposición del mando estatal en materia de seguridad, de no ser así, se violenta el propio decreto, la Constitución y demás reglamentos al respecto es el Gobierno del Estado”.
Que no les queda otra más que apechugar y arroparse en el marco jurídico para impedir abusos en contra de la autonomía del municipio, y lamentó la falta de argumento alguno para que el Gobierno del Estado designara el mando policiaco en Cuernavaca, así como el descuido de parte de la policía estatal para vigilar el edificio administrativo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana en este afán por imponer su decisión.
Como ayuntamiento, dijo que brindaron toda la confianza en el Ejecutivo que a su vez, respondió con “una patada en el trasero”, dijo literalmente, y con ello, la buena relación que iniciaba con el Ejecutivo a través del secretario Pablo Ojeda, cuya palabra queda muy endeble por estas actuaciones.