Pese a la consulta, las autoridades deben esperar que los juzgados resuelvan la situación jurídica
Aunque la mayoría de ciudadanos que participaron en la consulta de este fin de semana dieron su aprobación a la termoeléctrica de Huexca, lo cierto es que la operación de la polémica central de ciclo combinado todavía parece estar muy lejos: además de la problemática social que ha impedido su puesta en marcha, hay todo un esquema legal detrás que podría tardar años en resolverse.
De acuerdo con Juan Carlos Flores Solís, vocero del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua de Morelos, Puebla y Tlaxcala (FPDTA-MPT), hasta la fecha se han iniciado por lo menos 10 amparos donde los pobladores recriminan la construcción de los tres grandes elementos del Proyecto Integral Morelos (PIM) en su territorio: su acueducto (en Ciudad Ayala y Cuautla), su gasoducto (en Puebla y Tlaxcala) y la termoeléctrica, Morelos.
Podría ser cuestión de años
Un amparo puede tardar mucho en ser resuelto: en 2014, los habitantes de Atlixco, Puebla, interpusieron uno ante el Juzgado Primero de lo Penal contra la instalación del gasoducto en su comunidad, retirando la licencia de construcción y de uso de suelo. Cinco años después, el juez finalmente resolvió a su favor, por lo que la Secretaría de Energía tendrá que llevar a cabo una consulta indígena donde los pobladores decidan si la tubería se queda o se va.
Para Juan Carlos Flores, lo que ocurrió con este amparo da una pauta de lo que podría pasar con los más recientes, tres de ellos iniciados en pleno 2019, contra la consulta que se efectuó el pasado fin de semana, convocada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Con ese precedente, la posible puesta en marcha de la termoeléctrica podría retrasarse varios años más.
De los 10 amparos, cuatro de ellos han logrado la suspensión para que la termoeléctrica no use agua del río Cuautla.
para enfriar sus turbinas. En Huexca, los pobladores interpusieron dos, uno para evitar que la termo devuelva agua contaminada al río, con suspensión definitiva; y uno más relacionado con la construcción de un ramal privado que surtiría con gas para las industrias de la región.